El ministro chino de Exteriores, Wang Yi, afirmó que “las acciones de Israel han ido más allá de la defensa propia” y pidió a ese país que acate los llamados de la comunidad internacional y Naciones Unidas de “parar el castigo colectivo sobre los habitantes de Gaza”.
Wang transmitió esa opinión el sábado a su homólogo de Arabia Saudí, Faisal bin Farhan, durante una llamada en la que subrayó la voluntad de su país para trabajar con los países árabes en el apoyo a la restauración de los derechos nacionales de los palestinos, informó hoy la agencia oficial Xinhua.
Esta semana el Gobierno israelí transmitió al chino su “profunda decepción” por los comunicados y declaraciones oficiales del país asiático respecto a la escalada de violencia desatada entre Israel y el grupo islamista Hamás, en los que para Israel no hay «una condena clara y sin ambages» contra los ataques de esta organización.
“China está lista para trabajar con Arabia Saudí y otros países árabes para seguir respaldando a los palestinos en su causa justa de restaurar sus derechos nacionales y llevar la cuestión palestina al cauce correcto de la solución de los ‘dos Estados’ para que pueda ser resuelta de forma justa y permanente”, dijo Wang en su conversación con el ministro saudí.
La llamada se produjo en la misma jornada en que el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, aterrizó en Arabia Saudí en el marco de su gira por Oriente Medio en medio de la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás.
En la conversación, Wang reiteró que todas las partes deben contenerse de acciones que empeoren la situación y regresar lo antes posible a la mesa de negociación.
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China “condena todos los actos que dañen a civiles porque violan la conciencia humana y las normas básicas de las relaciones internacionales”, consideró el jefe de la diplomacia china.
Subrayó que China mantiene “comunicación intensiva con todas las partes” para lograr un alto el fuego y el fin de la lucha y añadió que las tareas prioritarias son la seguridad de los civiles, la apertura de corredores humanitarios para que entre ayuda lo antes posible y la protección de las necesidades básicas de los gazatíes.
Según el comunicado oficial chino, el ministro saudí transmitió a su homólogo la profunda preocupación de su país por la situación y su condena de los ataques a civiles y el desplazamiento forzado por Israel en Gaza.
Bin Farhan juzgó imperativo que la ayuda humanitaria llegue a esa zona cuanto antes y pidió a la comunidad internacional que se una para evitar que el conflicto se expanda a otros países.
Arabia Saudí, según el ministro, cree que sin la implementación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y sin el establecimiento de un Espado Palestino independiente “no puede haber soluciones justas ni permanentes”.
Su país, agregó, está preparado para trabajar con China a la hora de urgir a todas las partes a acatar las leyes humanitarias internacionales, proteger a los civiles y aplicar las resoluciones del Consejo sobre la cuestión palestina.
Un día antes, el enviado especial de China para Oriente Medio, Zhai Jun, se reunió con embajadores y diplomáticos de los países y la Liga Árabe en el país asiático a pedido de estos últimos, que confiaron en que Pekín siga jugando un papel positivo y constructivo en la resolución de la crisis.
