Santo Domingo.- El acusado de estafar a personas de apellido Rosario, el abogado Johnny Portorreal Reyes, mandó a «trabajar» a sus querellantes y a los periodistas que trataban de abordarlo, en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
Específicamente, Portorreal dijo con cara sonriente: «Váyanse a trabajar», mientras era trasladado de la cárcel preventiva hacia la Oficina de Atención Permanente para el conocimiento de la medida de coerción.
«Habla ahora», le vociferaban parte de los acusadores.
Al imputado se le vio muy relajado, sonriente y contento al bajar de las escaleras cuando era custodiado por las autoridades.
Johnny Portorreal Reyes es acusado de una presunta estafa en detrimento de 283 personas, a quienes le prometía cobrar la supuesta herencia de la familia Rosario.