Santa Cruz (Bolivia).- Agrupaciones de mujeres se vistieron de negro en Santa Cruz, la mayor región de Bolivia, y alzaron su voz este sábado para pedir «justicia» por las mujeres y niñas que han sido asesinadas, en una marcha en conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
«Alzamos la voz por el derecho de las mujeres. En Bolivia hay una crisis de abusos, de violencia y de asesinatos de mujeres. Alzamos la voz por todas las mujeres y niñas que han sido silenciadas y esperamos que el Gobierno nos dé políticas con acciones», afirmó la activista Angélica Ospina.
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La activista indicó que, según datos oficiales, hay 800 casos de violencia contra las mujeres que nunca llegaron a una sentencia y denunció que hay funcionarios de justicia que «se prestan para cerrar los casos».
Niñas, jóvenes y adultas marcharon esta jornada por las calles céntricas de la ciudad de Santa Cruz para exigir que se respeten sus derechos, para pedir equidad en los ámbitos laborales y un freno a la violencia.
Las manifestantes mostraron carteles con las fotografías de mujeres asesinadas en los últimos meses y otras contaban por altavoz lo que ocurrió con los principales acusados de matarlas.
«Somos la voz de las que ya no están», «Hoy soy la voz de quien gritó pidiendo ayuda» y «¿A qué mujer de tu vida le tiene que pasar para que te importe?», fueron algunos mensajes que llevaban algunas mujeres en carteles hechos a mano y en algunos casos con pintura roja.
Bolivia está entre los países de la región con los índices más altos de violencia hacia las mujeres.
La Fiscalía boliviana registró del 1 de enero al 7 de marzo 8.477 casos de delitos relacionados a la violencia contra la mujer.
De ese número, 6.518 fueron denuncias por violencia familiar o doméstica, se registraron 11 feminicidios, 554 casos de abuso sexual y 515 de violación.
Una norma penal castiga el feminicidio con 30 años de prisión sin derecho a indulto, la pena máxima dispuesta en la legislación boliviana.
Las organizaciones feministas reclaman desde hace años que esta norma no se cumple plenamente por carencias como la falta de presupuesto y personal adecuado para atender estos sucesos.
El año pasado, un grupo de legisladores del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) propuso reformar la norma por considerarla «antihombres», lo que fue rechazado por activistas, la oposición y el Gobierno nacional.
El Sistema de las Naciones Unidas en Bolivia hizo un llamado a «proteger y ampliar los avances en el ejercicio de los derechos y el empoderamiento de las mujeres y niñas, y a evitar cualquier retroceso en la construcción del camino hacia la igualdad».
