El presidente Luis Abinader y la alcaldesa Carolina Mejía presentaron ayer el Plan Integrado de Santo Domingo, un proyecto que busca ordenar y modernizar la capital de la República Dominicana como nunca antes en sus más de 500 años de historia.
Este ambicioso plan aborda problemáticas clave como la movilidad, la sostenibilidad y la infraestructura urbana, y requiere de una coordinación interinstitucional efectiva para garantizar su ejecución y generar un impacto positivo en la vida de los ciudadanos.
Uno de los aspectos más destacados es la transformación del litoral de Santo Domingo, con la construcción del Malecón Deportivo y el parque Santo Domingo del Mar en el Paseo del 30 de Mayo. Estas iniciativas no solo mejorarán la calidad de vida de los capitaleños al ampliar los espacios públicos, sino que también fortalecerán la oferta turística y recreativa de la ciudad. Proyectos como la nueva marina y el puerto de cruceros refuerzan la visión de una capital conectada con el mundo, impulsando el crecimiento económico.
No obstante, para hacer realidad este proyecto se necesita más que buenas intenciones. La experiencia ha demostrado que muchas iniciativas urbanísticas han quedado a medias debido a la falta de continuidad en las políticas públicas y a la burocracia. Para evitar este destino, es fundamental un compromiso firme tanto del Gobierno central como del Ayuntamiento, además de la participación activa de la sociedad civil. La supervisión, la transparencia en la ejecución y la consulta con expertos en urbanismo serán determinantes para su éxito.
Santo Domingo necesita con urgencia un ordenamiento estructurado y sostenible que le permita crecer de manera organizada. Si el Plan Integrado de Santo Domingo se materializa con eficacia, la capital dominicana podría convertirse en un referente regional de modernización y planificación urbana. Pero el verdadero desafío no está solo en diseñar grandes proyectos, sino en ejecutarlos con responsabilidad, para que la ciudad del futuro deje de ser una promesa y se convierta en una realidad tangible para todos.