Santo Domingo. – Hace alrededor de tres años los residentes del barrio Pantoja I recibieron un papel, al que no le pusieron atención hasta que llegó el segundo e inmediatamente la vida de cientos de ciudadanos que viven en la zona desde hace más de 40 años se descontroló.
María Micelania Pérez, llegó al sector en los años 90´s, cuando apenas había dos o tres casitas de madera y de zinc. Allí elaboró su hogar y con muchos sacrificios fue construyendo su casa que, aunque no está terminada, ha sido el lugar donde sus hijos han crecido.
Con tristeza, la señora Micelania narró como se sintió en ese momento cuando leyó el documento que decía que toda la localidad iba a ser desalojada. Esta información que sorprendió a todo el barrio, al punto que muchos enfermaron por el impacto de imaginar que los echarían a la calle.
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Historias como el de la señora María abundan en Pantoja I. En un recorrido por el sector, De Último Minuto conoció la situación del señor Luis Rosario, quien vive en la localidad desde el 1987 y manifestó que ha sufrido de los nervios desde que conoció la noticia y por la que, según destacó perdió a su esposa hace casi un año.
“Ay Mire, la esposa mía murió, va a tener un año ahora. Después que le dijeron eso enfermó, mire eso me ha desbaratado. A la persona que vino aquí le dije yo es mejor que le quiten la vida a uno de una vez, porque yo pase mi juventud trabajando construcción para yo criar mis hijos y ya que lo tengo criados, que lo poco que pude ahorrar fue para levantar esta casa y que me la quiten también”, indicó el señor Rosario.
En busca de soluciones para Pantoja I
María y Luis, explicaron a este medio que como comunidad tuvieron la oportunidad de presentarle la inquietante situación al presidente Luis Abinader, durante una reunión realizada en Pantoja I, donde fueron escuchados por el gobernante.
Según María, en el encuentro el mandatario apoderó al senador de la provincia Antonio Tavares para que éste investigara la situación y planteara las soluciones que pudieran llevar tranquilidad a cientos de familia del populoso sector.
En la actualidad, el proceso se encuentra se encuentra en negociación por parte de los supuestos dueños legítimos y el Estado dominicano, por lo que, se espera que los residentes puedan seguir viviendo en sus casas con la calma que merece cada familia dominicana y puedan obtener sus títulos de propiedad.
