SANTO DOMINGO. Abogados que forman parte de la defensa de distintos imputados en el caso Odebrecht, aclararon que el asesor Miguel José De Moya ejecutó, en lugar de una mediación, una función de amenaza a sus clientes para que no se pronunciaran en la prensa contra la acusación de la Procuraduría General de la República (PGR).
Eric Raful, Miguel Valerio y Manuel Rodríguez afirmaron que De Moya, implicado en la Operación Medusa, ciertamente se reunió con varios de los encartados en el proceso Odebrecht, pero para tratar de censurarlos con el propósito de que los medios solo publicaran las versiones de la PGR y del ex procurador Jean Alain Rodríguez.
“En las reuniones, por separado, a algunos les dijo que apenas la prensa había revelado una reducida proporción de informaciones en manos de la PGR, que supuestamente tenía más vías para hundir a los imputados que se activaran en los medios de comunicación”, indica un comunicado de los abogados.
Manifestaron que De Moya, con tinte de chantaje, llegó a plantear , a nombre del entonces Procurador, la idea de que el caso Odebrecht funcionara “como unos vagones que a lo largo del proceso harían paradas para ir bajando a los imputados en distintas estaciones.” En ese contexto, Moya dejó entrever que “los imputados que desarrollaran acciones mediáticas contra los argumentos de la Procuraduría,” corrían el riesgo de que su vagón no se detuviera en ninguna estación, con una clara intención de amedrentar y aplicar censura, impidiendo el derecho a la defensa. “»»Naturalmente, y como se ha podido ver, nuestros clientes han asumido su derecho a la defensa desde el punto de vista legal y reputacional, porque el origen de este proceso estuvo marcado por una exposición mediática con el fin de lograr una condena en la opinión pública”, expresaron los abogados en una declaración conjunta.