Este viernes, las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron una íserie de objetivos del movimiento Hezbolá en el sur del Líbano. Entre otras cosas, las FDI atacaron el cuartel general central de la organización, situado debajo de edificios residenciales de Beirut.
Los medios reportaron que el objetivo del ataque en Beirut era el máximo líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah. Asimismo, fuentes israelíes afirman que el bombardeo se realizó después de recibir información de que el secretario general del movimiento había llegado al búnker.
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Por su parte, Hezbolá lanzó una andanada de cohetes contra Israel. Medios locales informaron que las sirenas antiaéreas sonaron en la ciudad Israel de Safed y comunidades cercanas.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ordenó que las fuerzas de EE.UU. en Oriente Medio sean ajustadas «según resulte necesario», informa la Casa Blanca tras la ola de ataques israelíes a Beirut.
«Ha ordenado al Pentágono que evalúe y ajuste según resulte necesario la postura de las fuerzas estadounidenses en la región, para mejorar la disuasión, garantizar la protección de las fuerzas y apoyar toda la gama de objetivos estadounidenses», reza el comunicado, citado por Reuters.
El Ejército israelí sigue atacando objetivos de Hezbolá en Beirut. Durante la noche se han registrado varias oleadas de ataques. Algunos videos aparecen en las redes sociales mostrando aparentes explosiones y llamas.