Ciudad de México.- Las economías regionales de México se expandirán de forma moderada ante un entorno complejo e incierto que representa desafíos para su crecimiento, detalló este viernes el Banco de México (Banxico).
En su reporte sobre las economías regionales correspondiente al tercer trimestre de 2024, el banco central mexicano señaló que, «aunque hubo una expansión económica en las regiones norte y centro del país, el sur mostró signos de debilitamiento».
Hacia adelante, añadió el documento, «las regiones (económicas) enfrentan retos tanto externos, como la desaceleración económica de Estados Unidos, incertidumbres en comercio internacional y migración», como internos, incluyendo la inseguridad pública, fenómenos climáticos extremos y reformas legislativas en curso.
“Todo esto ocurre en un contexto en el que las fuentes consultadas identifican el riesgo de un menor flujo de recursos públicos hacia las regiones ante la consolidación fiscal anunciada para 2025, especialmente aquellos destinados a la inversión en infraestructura”, añade el documento.
Para enfrentar estos desafíos, Banxico propone una serie de medidas prioritarias, como fortalecer el estado de derecho y la seguridad pública, elementos clave para generar un entorno de estabilidad y confianza que permita reducir costos operativos y fomentar la inversión.
“Frente a estos desafíos, es fundamental continuar fortaleciendo las fuentes internas de crecimiento y generar condiciones favorables para la inversión”, se lee en el documento.
Otra estrategia es la formación de capital humano, considerada esencial para incrementar la productividad y competitividad de las regiones, además de contribuir a mejorar los ingresos salariales y la calidad de vida de la población.
El reporte también enfatiza la necesidad de construir infraestructura y optimizar el uso de recursos naturales, particularmente en proyectos hidráulicos y energéticos y subraya la importancia de implementar políticas de mitigación y adaptación al cambio climático.
A pesar de los desafíos, el reporte identifica oportunidades estratégicas, como la relocalización de cadenas de suministro hacia México, impulsada por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.