Budapest.- El ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, indicó que, para poder prescindir del petróleo ruso su país necesitaría 4 años y unas inversiones de 750 millones de euros, una cifra muy inferior a los 18.000 millones en los que evaluó el lunes el coste de transformar la estructura energética de Hungría.
«La ampliación del abastecimiento (por el oleoducto Adria) requeriría una inversión de 200 millones de euros, mientras que la transformación de la capacidad de refinamiento significaría un coste de 550 millones de euros», aseguró el ministro ante la Comisión de Economía del Parlamento húngaro.
Puedes leer: Petróleo de Texas sube un 4,18 % tras plan de UE para vetar el crudo ruso
Ese cálculo es muy inferior al que el propio Szijjártó planteó el pasado lunes.
«La Comisión Europea (CE) ha creado un problema y los húngaros esperan que ofrezca también una solución a la financiación de las inversiones, a la compensación del alza de precios y a la modernización del sector energético de Hungría, por un valor total de entre 15.000 y 18.000 millones euros», dijo entonces.
Hungría es uno de los países que se opone a incluir un veto a la compra de petróleo ruso dentro del sexto paquete de sanciones que prepara la Comisión Europea contra Rusia por su invasión de Ucrania, argumentando el alto coste que supondría para su economía debido a su gran dependencia energética de Rusia.
Hungría importa desde Rusia el 65 % del petróleo y el 85 % del gas que consume.
La CE y Hungría no han llegado hasta el momento a un acuerdo sobre el apoyo de Hungría a las sanciones, que deben aprobarse por unanimidad de los socios comunitarios.
