Santo Domingo.- La Armada y la cartera de Medio Ambiente y Recursos Naturales firmaron un acuerdo para garantizar la vigilancia permanente en las Dunas de Baní, en Peravia, y proteger así esta zona protegida, informó este viernes el ministerio.
Esta decisión, que se enmarca en las nuevas iniciativas preventivas para proteger el Monumento Natural Dunas de Las Calderas, llega a raíz de una investigación que permitió identificar al presunto responsable de una tala y quema en esa área este mes.
Esto derivó en que el ministerio iniciara una serie de acciones, entre ellas este acuerdo interinstitucional, así como la desvinculación del administrador del parque y la remisión a la Procuraduría Especializada para la Defensa del Medio Ambiente y Recursos Naturales del presunto infractor.
El acuerdo suscrito por el ministro de Medio Ambiente, Paíno Henríquez, y el comandante general de la Armada, vicealmirante Agustín Alberto Morillo Rodríguez, establece que esa cartera proporcionará motocicletas para facilitar el patrullaje permanente en la zona por personal de la Armada.
También puedes leer: Abinader enciende luces de Villa Navidad en el Palacio de los Deportes
De esta forma, indica un comunicado ministerial, se reforzarán los trabajos preventivos y se asegurará una respuesta rápida ante cualquier actividad que amenace este patrimonio natural, ubicado en la comunidad de Quijá Quieta.
Además, a fin de preservar este monumento natural, están en proceso de construcción tres nuevas torres de vigilancia de unos nueve metros de altura ubicadas estratégicamente en el área protegida, dos garitas de vigilancia para controlar el tráfico de materiales producto de ilícitos ambientales, el centro de visitantes de las Dunas, una estructura de boletería y una verja perimetral.
Según el viceministro de Áreas Protegidas y Biodiversidad, Carlos Augusto Batista, el acuerdo facilitará la vigilancia del área protegida en todo el perímetro de unos 16 kilómetros de línea costera que pertenecen a las dunas y dará apoyo a Medio Ambiente contra los ilícitos ambientales provocados por actividades agrícolas, extracción ilegal de minería no metálica y ganadería, en concreto la crianza de chivos.
La nota ministerial anuncia que la zona afectada recientemente será sometida a un estudio de la Dirección de Bosques del Viceministerio de Recursos Forestales para determinar si requiere regeneración asistida o si es posible recuperar su estado de manera natural.
