Nueva York Aaron Judge sigue protagonizando una temporada para el recuerdo, el cañonero de los Yankees conectó un jonrón de oro la noche del jueves que terminó detrás del bullpen de los visitantes.
Sin embargo, quizás eso sólo es cierto para los que hemos tenido la fortuna de ver a Judge día tras día. Andrew Benintendi ha visto al candidato al JMV este año principalmente en los resúmenes de los mejores momentos en la televisión, y cuando el batazo de Judge sentenció el triunfo 1-0 sobre los Reales, el nuevo miembro de los Yankees supo que estaba viendo algo especial.
“Viéndolo desde el otro lado, es increíble lo que está haciendo”, dijo Benintendi. “Ser parte de eso esta noche, es casi como si dibujaron la situación exactamente como él la quería”.
El 39no jonrón de Judge, líder de las Grandes Ligas, rescató a los Yankees después de que fueron limitados a un hit en ocho innings, principalmente por la dominante actuación de 10 ponches de Brady Singer durante los primeros siete actos.
Enfrentando al cerrador de los Reales, Scott Barlow, en la baja del noveno, Judge descargó un jonrón de 431 pies que les permitió a los Yankees celebrar su 12do triunfo de oro del año, el tope en las Mayores. Los tres jonrones para dejar en el terreno al rival de Judge en el 2022 empatan a Mickey Mantle (1959) con la mayor cantidad para un Yankee en una misma campaña.
“Especialmente en esa situación, venía de 3-0 con dos ponches. ¿Qué es lo peor que podía pasar?”, dijo Judge. “Yo sólo voy a allá afuera a tratar de hacer el trabajo. Buscar algo sobre el plato y hacer que pase algo para los muchachos que vienen detrás de mí. Con suerte pasó con el primer pitcheo y pudimos lograrlo”.
Combinado con la adquisición de Benintendi, quien llegó desde Kansas City el miércoles por tres jugadores de ligas menores y se fue sin hit en su debut para los Yankees, el jonrón de Judge sirvió como un salvavidas después de que los Bombarderos fuesen barridos por los Mets en la Serie del Subway esta semana.
“Hoy fue complicado, especialmente viniendo de dos derrotas en Citi Field”, dijo Judge. “Y luego llegas aquí y Singer nos apaga todo el juego. El asunto no se sentía muy bien. Pero este equipo tiene mucho corazón hasta el final”.
Sirviendo como bateador designado, Judge atravesó el clubhouse camino al home en el noveno cuando el relevista Ron Marinaccio le dijo: “Vamos a acabar con esto”.
Cerca de dos minutos después, mientras veía el juego desde el gimnasio, las luces intermitentes del Yankee Stadium llamaron la atención del abridor Jameson Taillon: era la señal de que tenía que correr al terreno.
“Estábamos como, ‘Este hombre lo volvió a hacer’”, dijo Taillon. “De verdad es increíble, pero ya es como si esperamos que pase. Pareciera que en todos los momentos grandes, él sale a batear y responde”.
Fuente: Las Mayores
