Río de Janeiro. – El Banco Central de Brasil lanzó este martes dos monedas conmemorativas por el bicentenario de su Independencia, que se celebrará el 7 de septiembre próximo, una de las cuales es la primera pieza metálica de la historia del país con detalles coloridos.
Se trata de una moneda de plata con valor nominal de 5 reales (unos 94 centavos de dólar) que será ofrecida a los coleccionistas por 420 reales (unos 78,6 dólares) y otra de cuproníquel por valor nominal de 2 reales (unos 37 centavos de dólar) y valor de venta de 34 reales (unos 6,4 dólares), ambas con detalles alusivos a la Independencia de Brasil.
Pese a su menor valor, esta última será la más novedosa debido a que será la primera moneda en la historia de Brasil en contar con detalles coloridos en ambos lados.
En el anverso tendrá una franja verde y amarilla, los colores de la bandera brasileña, decorando la letra de la primera estrofa del himno de la Independencia, y en el reverso una reproducción de una escena del cuadro Independencia o Muerte, la famosa obra del pintor Pedro Américo y que retrata el momento en que el emperador Pedro I declara el fin de la condición de Brasil como colonia de Portugal.
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La moneda de plata, sin colores, tiene en su frente una bandera de Brasil y la primera estrofa del Himno de la Independencia y en la parte trasera una reproducción de la sesión en que el Consejo de Estado, presidido por la princesa Leopoldina, redacta las cartas en que se le solicita a Pedro I que rompa con la corona portuguesa.
Las monedas del bicentenario de la independencia
«Las dos monedas retratan el momento histórico que trajo como resultado la independencia de nuestro país», afirmó el presidente del Banco Central, Roberto Campos Neto, en la ceremonia de lanzamiento.
Según el Emisor, inicialmente estarán acuñadas 5.000 piezas de la moneda de plata y 10.000 de la de cuproníquel, pero esos números pueden quedar elevados hasta 20.000 y 40.000 respectivamente.
Las piezas en homenaje a los 200 años de la Independencia de Brasil, producidas por la Casa de la Moneda tras la aprobación del Consejo Monetario Internacional y como parte de las conmemoraciones por la fecha patria.
Entre los principales actos conmemorativos destaca la exhibición del corazón de Pedro I, cedido temporalmente por el Gobierno de Portugal, y la reapertura del Museo de Ipiranga tras nueve años de obras.
