Santo Domingo.– Propietarios y empleados de comercios ubicados en Villa Mella, Santo Domingo Norte, se presentaron este martes en las instalaciones de Edeeste en protesta de las altas facturas y los apagones.
El representante de los comerciantes de la Avenida Hermanas Mirabal, Rafael Gálvez, explicó que han recibido promesas por parte de la entidad que no han sido cumplidas sobre la regulación de la falta de energía en la zona, la cual afecta los comercios que allí se encuentran.
“Nosotros tenemos 6 y 7 horas de apagones, se nos hacen promesas de que se va a normalizar, todo el tiempo se está normalizando y siempre hay una avería, siempre hay un problema” expresó Galvez.
En ese sentido, el representante y propietario de la repostería Mamota manifestó que al mes duran hasta 13 y 14 días sin energía eléctrica, razón que ha causado que las ventas de su negocio se redujeran de RD$30,000 a RD$2,000 pesos diarios.
El Lic. Pedro Cleto, hizo un llamado al presidente Luis Abinader alegando que los funcionarios de Edeeste están “acabando” con los comerciantes y el núcleo productivo de Santo Domingo Norte.
“Presidente le están haciendo un boicot, los funcionarios de aquí de Edeeste no están trabajando, mande inspectores para que usted los supervise, que solo vienen a reírse a las reuniones y hacerle falsas promesas a las juntas de vecinos y los comerciantes” pidió Cleto, uno de los protestantes.
En ese orden, Yeny Figueroa se unió a la petición del lic. Cleto, pidiendo al mandatario Abinader “poner orden” en el país, ya que según explica la delincuencia no sólo está en los robos y atracos, sino también en los funcionarios.
“Presidente yo estoy trabajando, como una burra, como un animal, (..), mi esposo y yo es trabajando honradamente que estamos para que funcionarios de Edeeste nos roben así tan fácilmente” sostuvo la comerciante visiblemente molesta, por el alto valor a pagar con el que llegan las facturas a su hogar y negocio sin recibir la energía eléctrica.
Los apagones en la zona, no sólo afecta los comercios de comida, que han perdido gran cantidad de clientes y productos alimenticios como el caso del Restaurante Sabroso Don José, sino también de adultos mayores que acuden a centros para recibir terapias para calmar dolores y por la falta de energía retornan a sus hogares sin recibirlas.
Los protestantes, aseguraron tener pruebas para evidenciar cómo las unidades móviles de la entidad reciben dinero de comunitarios dueños de viviendas para que “le conecten la luz”.