Hasta el momento no se han encontrado componentes explosivos en las muestras recogidas de la región de Guangxi, al sur de China, donde el pasado 21 de marzo se estrelló un Boeing 737-800 con 132 personas, informaron medios locales.
Tras un análisis físico y químico de 41 de las 66 muestras obtenidas, no se han detectado rastros de componentes orgánicos o inorgánicos comunes en explosivos, detalló este sábado Zheng Xi, jefe del cuerpo de bomberos de la localidad, durante una rueda de prensa sobre la situación de búsqueda y rescate.
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Hasta ahora, las autoridades han logrado recuperar 24.047 piezas entre restos y escombros de la aeronave operada por China Eastern Airlines. La primera caja negra fue descubierta el lunes y aún continúan las tareas para encontrar la segunda. No se encontraron sobrevivientes y ya se han confirmado las identidades de 120 personas, entre ellas, 6 tripulantes y 114 pasajeros.