Santo Domingo.- Albert Pujols, ha escrito un nuevo capítulo en su carrera al guiar a los Leones del Escogido al campeonato de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM) en la temporada 2024-2025. Este triunfo no solo pone fin a una sequía de nueve años para el Escogido, sino que también representa un logro trascendental para Pujols, quien debutó como mánager esta temporada.
Durante sus 23 años en las Grandes Ligas, Albert Pujols campeón acumuló logros que lo posicionaron como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. Entre sus hazañas destacan:
- 703 cuadrangulares, ocupando el cuarto lugar en la historia de la MLB.
- 3,384 hits, uniéndose al selecto club de los 3,000 imparables.
- 2,218 carreras impulsadas, el segundo registro más alto de la historia, solo detrás de Hank Aaron.
- Tres premios de Jugador Más Valioso (MVP), obtenidos en 2005, 2008 y 2009, todos con los St. Louis Cardinals.
- Dos títulos de Serie Mundial con los Cardenales, en 2006 y 2011, siendo una pieza clave en ambos campeonatos.
- 11 participaciones en el Juego de Estrellas, representando tanto a la Liga Nacional como a la Americana.
- Dos Guantes de Oro como primera base, reflejo de su excelencia defensiva.
- Premio al Novato del Año en 2001, tras una temporada debut extraordinaria.
En su primera experiencia como dirigente, Pujols lideró al Escogido a un campeonato histórico, logrando vencer en una emocionante Serie Final contra los Tigres del Licey. El título se definió en el séptimo partido, donde el Escogido se impuso con marcador de 6-5.
El encuentro decisivo tuvo como protagonista a Junior Caminero, jugador de los Rays de Tampa Bay en las Grandes Ligas, quien conectó un jonrón solitario en la novena entrada para sellar la victoria. Caminero completó una actuación memorable, bateando de 5-4 con dos dobles, un jonrón, una carrera impulsada y tres anotadas, lo que le valió ser nombrado Jugador Más Valioso de la Serie Final.
El campeonato número 17 en la historia del Escogido no solo simboliza un regreso a la cima del béisbol dominicano, sino también una reafirmación del liderazgo y la capacidad de Albert Pujols, quien continúa demostrando que su impacto en el béisbol trasciende su legado como jugador.