Diana Carreras
La ceremonia al Salón de la Fama de Cooperstown se realizará este domingo y en ella serán homenajeados algunos peloteros latinos que desde hoy formarán parte del selecto grupo de inmortales de este deporte.
Además de David Ortiz, serán reconocidos seis jugadores para la selección de este 2022, y de ellos dos más son latinos. Los cubanos Tony Oliva y Minnie Miñoso. Además, ingresarán Bud Fowler, Gil Hodges, Jim Kaat y Buck O’Neil.
Minnie Miñoso nació el 29 de noviembre de 1923, es reconocido como el primer jugador latino de raza negra en jugar en las mayores, tanto de la Liga Americana como de la Liga Nacional. Por esta razón, se le considera como el pelotero que abrió las puertas de las ligas mayores a todos los latinos.
Tony Oliva nació el 20 de julio de 1938. En 1961 firmó contrato con los Twins de Minnesota. Al año siguiente, llegó a Estados Unidos; entre 1962 y 1963 jugó algunos partidos en las mayores, pero fue hasta 1964 que se ganó la titularidad.
Tan solo en ese primer año, se ganó el reconocimiento de Novato del Año de la Liga Americana tras liderar toda la liga con un promedio de bateo .323, con 32 jonrones y 94 carreras impulsadas. Dominó la liga con su gran juego hasta 1971, cuando una lesión mermó para siempre su carrera. Se retiró después de la temporada de 1976.
En la historia del Salón de la Fama, creado en 1936, una docena de peloteros latinoamericanos fueron electos por la BBWAA al Salón de la Fama. Del grupo, los lanzadores Juan Marichal (1983) y Pedro Martínez (2015), el jardinero Vladimir Guerrero (2018) y Ortiz son nativos de República Dominicana, el país extranjero con mayor representación cada año en las Grandes Ligas del béisbol norteamericano.