Por Salvador Batista
México. -Quién diría que un día para recordar a sus seres queridos que se han ido en cuerpo y alma, puede generar tanta alegría y tantos recursos a un país.
Eso pasa en México desde finales de octubre hasta el 2 de noviembre, cuando más de 7 millones de personas se desplazan de un pueblo a otro a visitar las tumbas de familiares y amigos que se han ido de este mundo.
Esta celebración mueve anualmente cerca de 400 millones de pesos mexicanos, generando ser una de las fechas más importantes del país Azteca.
El Día de los Muertos en México es una experiencia única que cada año atrae a miles de visitantes de todo el mundo.
En 2008, la UNESCO declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad a la celebración del Día de Muertos, una de las festividades con más corazón y más profundas del pueblo mexicano.
Cada noviembre, las calles y casas se visten para recibir a todos aquellos que se han ido.
El corazón de esta tradición es que la vida es un viaje, por eso los mexicanos invitan a celebrarla viajando por varios de sus pueblos, los que le ponen mucho corazón a esta importante celebración.
Ciudades y pueblos de México se convierten en lugares mágicos y se llenan de colores y sabores para vivir la celebración del Día de Muertos.
Los mexicanos invitan a ponerse el mejor sombrero de catrina o su mejor máscara de calavera y ¡a disfrutar! La idea es dejarse envolver por esta tradición que pone a México en el centro del calendario internacional.
El centro de la Ciudad de México con su Alameda, el corredor de la calle Madero y el Zócalo se llenan de detalles tradicionales en estas fechas con un recorrido de catrinas.
Después de una pausa por la pandemia de la Covid-19, este 2021 se decidió realizar con las precauciones correspondientes diferentes actividades culturales conmemorando esta fecha.