San Diego.— Frente a la eliminación, los Dodgers de Los Ángeles respondieron con autoridad y derrotaron a los Padres de San Diego 8-0 en el Juego 4 de la Serie Divisional de la Liga Nacional, forzando un decisivo Juego 5 que se disputará el viernes en el Dodger Stadium.
A pesar de la ausencia de su estrella Freddie Freeman, lesionado, los Dodgers demostraron una vez más la fortaleza de su alineación ofensiva. Mookie Betts, liderando la carga, conectó un jonrón por segundo día consecutivo en la primera entrada. Con cinco carreras en los primeros tres innings, Los Ángeles aprovechó el agotamiento del abridor de los Padres, Dylan Cease, y su bullpen.
El mánager de los Dodgers, Dave Roberts, expresó su orgullo por la actuación de su equipo: “Es una pelea callejera en la postemporada, y nuestros muchachos han respondido. Estoy emocionado por el Juego 5”.
Entre Betts, Shohei Ohtani y el dominicano Teóscar Hernández, los primeros tres en el orden ofensivo, batearon de 13-6 y remolcaron tres carreras. El bullpen de los Dodgers también fue clave, logrando una blanqueada combinada con una actuación destacada de Ryan Brasier, quien lanzó 1.1 entradas perfectas para iniciar el juego.
Roberts confía en sus relevistas, quienes dejaron a los Padres en solo siete hits. Con el día de descanso el jueves, el bullpen estará listo para apoyar a los abridores Yoshinobu Yamamoto y Jack Flaherty en el decisivo Juego 5.
Mookie Betts, quien ha mejorado justo a tiempo en esta serie, declaró: “Sabíamos que no iba a ser fácil. Estamos tomando esto un juego a la vez, un inning a la vez”. Ahora, los Dodgers buscan avanzar a su primera Serie de Campeonato de la Liga Nacional desde 2021, enfrentando a los Mets si logran ganar el Juego 5.
“Confío en mí y en mis compañeros”, afirmó Betts. “Estaremos bien”.