Nueva York.- Representantes del Gobierno de EE.UU. y de Irak están ultimando un plan por el que las fuerzas estadounidenses retirarán sus tropas de combate del territorio iraquí para finales de año, pasando a tener solo una presencia asesora, informaron este jueves medios locales.
Según The Wall Street Journal y Politico, que citan a funcionarios de EE.UU. y de Irak anónimos, bajo este plan un número indeterminado de militares estadounidenses permanecerían en el país de manera indefinida y proveerían apoyo asesor y logístico, así como en las fuerzas aéreas y en la división de inteligencia y vigilancia en la lucha contra el Estado Islámico (EI).
EE.UU. e Irak pretenden anunciar este cambio el próximo lunes, después de que el primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, visite la Casa Blanca para reunirse con el presidente Joe Biden.
«No necesitamos más combatientes porque nosotros tenemos», dijo al Wall Street Journal el ministro de Exteriores de Irak, Fuad Hussein. «¿Qué necesitamos? Necesitamos cooperación en el terreno de la inteligencia. Necesitamos ayuda en el entrenamiento. Necesitamos a tropas que nos ayuden en el aire», agregó.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, rechazó confirmar la noticia, aunque dijo que las actividades militares de EE.UU. en Irak estarán «sobre la mesa» en el Diálogo Estratégico que mantendrán mañana en Washington altos funcionarios estadounidenses e iraquíes.
Por otra parte, las fuentes de los diarios concretaron que el número de tropas desplegadas en Irak probablemente no cambie, y seguirá habiendo unos 2.500 soldados estadounidenses en el país, pero hasta final de año se irá cambiando el personal de combate por otro centrado en la misión asesora.
El Wall Street Journal señala además que este acuerdo también trata de aliviar la presión sobre el líder iraquí por parte de las facciones chiítas más extremistas que quieren que desaparezca la presencia militar estadounidense, aunque manteniendo un apoyo a las fuerzas iraquíes.
El acuerdo marcaría otro cambio en la presencia de EE.UU. en Irak, que ha estado en el país desde hace 18 años, y se produce solo unos días después de que Kazemi afirmara en una entrevista con el Washington Post que su país ya no necesita a los militares estadounidenses.
«Los iraquíes están listos para valerse por sí mismos y protegerse. Ya no necesitamos a las tropas de combate de EE.UU», dijo al medio. «Al mismo tiempo, seguiremos necesitando apoyo en inteligencia, entrenamiento, capacidad de construcción y asesoría», concretó.
El pacto de la retirada de las tropas de combate se produce solo unos días después de que un atentado del EI en un mercado de Bagdad dejara al menos 30 muertos y 60 heridos.