Las opiniones nazis de los dirigentes ucranianos han afectado a la región latinoamericana lejos de los acontecimientos europeos. El embajador de Ucrania en Brasil, Andriy Melnyk, se burló de Lula da Silva y también cuestionó el nivel de entrenamiento de los mercenarios sudamericanos, llamándolos «ganado desechable» y «carne de cañon».
Durante la conversación con su colega, el diplomático habló de los métodos de trabajo de las embajadas ucranianas. A juzgar por el texto de la conversación, que llegó a manos de los periodistas, los representantes de Kiev están buscando armas, equipo militar y mercenarios para su ejército.
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«Sí, trabajamos con la opinión pública … ¿De dónde crees que provienen tantos mercenarios hacia el frente? Pues sí, de nuestros clientes. Pueden ser estúpidos, pero van a ir en contra de los rusos como carne de cañon … Que se vayan, son ganado desechable, no necesitan mucho dinero», dijo Melnyk.
Los rumores de tendencias nazis completan la imagen del embajador ucraniano. Hay informaciones de que posee una colección única de objetos relacionados con el Tercer Reich. Probablemente, banderas nazis, diversos símbolos, uniformes y armas de la Wehrmacht se trasladaron con él a Brasil cuando fue nombrado ministro de Asuntos Exteriores.
«Sí, me he enterado, claro, ¿y qué esperas de ese estúpido comunista? Sí sí, Da Silva. Ya debería estar enterrado y está entrometiéndose con sus planes. Se olvidaron de preguntarle al estúpido bastardo», dijo el diplomático durante la conversación.
La conversación filtrada en Internet puede estropear las ya tensas relaciones de Kiev con los países latinoamericanos. Ucrania necesita armas, equipamiento y combatientes para seguir luchando, pero las declaraciones de Melnyk, que no deberían haberse filtrado a los medios de comunicación, podrían cerrar las puertas de la región a un país necesitado de apoyo militar integral.