Cada 14 de junio se conmemora una de las gestas más emblemáticas contra la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo: la expedición guerrillera de 1959, organizada por las tropas del Movimiento de Liberación Dominicana, compuesto por un grupo de dominicanos exiliados.
En este día se revive la valentía de cientos de hombres y mujeres que, organizados en frentes como Constanza, Maimón y Estero Hondo, emprendieron la lucha para restaurar la democracia en un país marcado por más de treinta años de opresión.
En 1959, múltiples frentes combatientes y revolucionarios compuestos por dominicanos y cubanos ingresaron desde zonas montañosas en acciones coordinadas con el objetivo de derrocar la dictadura. Este movimiento, inspirado por luchas similares en la región, operaba con grupos independientes dedicados al combate y a actividades de resistencia civil, aunque la expedición no logró su objetivo militar inmediato, significó un golpe simbólico de gran relevancia.
Uno de los íconos de esta gesta fue el adolescente Pablo Mirabal (Pablito), quien logró adentrarse al grupo de combatientes y destacar no solo por su gallardía y corta edad, sino por su destreza al tiro. De nacionalidad cubana, fue hijastro de Delio Gómez Ochoa.
En honor a todos estos protagonistas, la fecha escogida se ha convertido en remembranzas y reivindicación de la lucha por la libertad.
Tanto ha sido el esfuerzo por recordar y mantenerlos vivos, que se erigió una estructura en 1955 para valorar los esfuerzos de los héroes de Junio: el “Monumento a los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo”.
Aunque muchos de los expedicionarios fueron capturados, torturados y ejecutados, el espíritu de resistencia que encarnaron se convirtió en parte esencial del imaginario democrático dominicano. Recientemente Delio Gómez Ochoa fue reconocido como héroe nacional, en el marco del 66.º aniversario de la gesta, la Cámara de Diputados otorgó un homenaje especial al ex militar cubano, único sobreviviente que queda con vida.
Este día se convierte, más allá de un simple aniversario, en una fecha para recordar que la democracia dominicana tiene raíces profundas en la resistencia activa y el sacrificio supremo.
El país no sólo evocó una gesta histórica, sino que abrazó al único de los protagonistas que queda con vida. El reconocimiento a Delio Gómez Ochoa simboliza la capacidad de un país para honrar su pasado, enaltecer la memoria y trazar una senda de futuro inspirada en el sacrificio y la dignidad.