Lisboa.- La Sanidad portuguesa registró 190 casos de mutilación genital femenina en 2022, un 27,4% más que el año anterior, de los cuales uno fue realizado en Portugal, según datos de la Dirección General de Salud (DGS) lusa divulgados hoy.
La DGS publicó este lunes en un informe que la media de edad de las víctimas de mutilación (la extracción o lesión de los genitales externos de las mujeres sin ninguna causa médica) fue de 6,6 años, que en el 73% de los casos ocurrió antes de los 9 años de edad y que hubo «complicaciones» en 100 casos.
El 70,5% de las mutilaciones registradas tuvieron lugar en Guinea-Bisáu y el 23,7% en Guinea-Conakri.
La entidad tiene constancia de una mutilación genital femenina realizada en Portugal, aunque no de la edad de la víctima.
La mayoría de los registros en el sistema sanitario luso se dieron durante la vigilancia del embarazo, la recuperación tras el parto (55,7%), en consulta (22,6%) o en internamiento (21,6%).
La DGS, que publicó este informe en el Día Internacional de la Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, precisó que ha registrado 853 casos desde 2014.
Según estimaciones del Hospital Professor Doutor Fernando Fonseca, especializado en estos casos en Portugal, en el país viven más de 6.500 mujeres que han sido víctimas de esta práctica.
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El Gobierno del socialista António Costa ha anunciado hoy ayudas de 80.000 euros a organizaciones de la sociedad civil que actúan mujeres mutiladas.
La Comisión estima que en Europa hay al menos 190.000 niñas que corren el riesgo de ser mutiladas y calcula que cada año llegan como solicitantes de asilo al menos 20.000 mujeres y niñas con riesgo de sufrir la ablación en sus países de origen.
