Nueva York.- La faceta empresarial del rapero Diddy se ha resentido después de que numerosas mujeres lo hayan acusado de agresión sexual y este martes su empresa mediática Revolt anunció que se ha «separado por completo» del que fuera su socio mayoritario, presidente y fundador.
Diddy, de 54 años y cuyo nombre real es Sean Combs, aprovechó su prominencia musical para invertir en empresas, convertirse en su rostro y mejorar la representación afroamericana en sus sectores, unos vínculos comerciales sensibles a su reputación, que se ha visto dañada en los últimos meses.
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El consejero delegado de Revolt, Detavio Samuels, indicó este martes en una entrevista con The New York Times que Diddy ya «no tiene acciones ni capital» en la empresa tras un proceso de «desvinculación» que empezó en enero, por lo que la mayoría de accionistas son ahora sus propios empleados.
Diddy fue acusado el pasado noviembre de agresión sexual y física durante años por una expareja, la cantante Cassie, una demanda que resolvió con un acuerdo económico y negando los hechos, pero desde entonces otras mujeres han hecho acusaciones similares contra él.
Desde noviembre, Diddy se ha desvinculado de Revolt, ha vendido la mitad de su marca de tequila DeLeón por unos 200 millones de dólares después de que la propietaria, Diageo, rompiera su contrato, y también ha sido apartado de una red de escuelas en barrios trabajadores de Nueva York.
