Con el paso del tiempo, el cargo de vicepresidente/a ha hecho quedar mal parados a los que decían que este puesto era una especie de adorno en el tren gubernamental.
Y es que, las responsabilidades que hoy en día asume esta figura (que muchas veces ha sido anulada de la Constitución de la República, pero en otras ocasiones ha sido reintegrada) van más allá de la función principal que establece la Carta Magna dominicana que es reemplazar al presidente o presidenta en caso de ausencia, incapacidad, muerte o renuncia.
Varias personalidades se han encargado de darle un toque distinto al segundo cargo de mayor jerarquía en el tren gubernamental, desempeñando múltiples funciones en los gobiernos, de acuerdo a sus propios intereses y a los del jefe de Estados de turno, poniendo de relieve su sello de trabajo y su compromiso con el país.
El caso de la actual vicepresidenta de la República, Raquel Peña, llama mucho la atención por el gran activismo y las múltiples funciones que ocupa a la Vicepresidencia.
A la lista de compromisos que asume desde el inicio del Gobierno, el presidente Luis Abinader le ha asignado la titularidad del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de forma provisional, tras el asesinato del ministro Orlando Jorge Mera.
Tales funciones serán ejercidas en adición a sus atribuciones constitucionales, de manera honorífica y hasta tanto se designe al titular de dicho ministerio.
Pero Raquel también es la coordinadora de los gabinetes de Promoción de Inversiones y de Salud. Este último cargo la ha mantenido muy activa, donde junto al Ministerio de Salud Pública y las Direcciones Nacionales de Salud, continúan haciendo frente a la COVID-19, de cara a proteger la salud y bienestar de los dominicanos y las dominicanas.
Sin duda, los presidentes han ido transfiriéndoles mayores obligaciones a los vicepresidentes con el paso del tiempo, ya sea por la confianza, la dedicación o compromiso que proyecta esta figura dentro de los planes de gobierno o cuando se presentan ciertas crisis que ameritan salidas rápidas y sabias.
Así lo vivieron en su momento personalidades como Milagros Ortiz Bosch, Margarita Cedeño, Rafael Alburquerque, Jaime David Fernández Mirabal, Jacinto Peynado, Carlos Morales Troncoso y Jacobo Majluta, entre otros.
Más allá de ser la primera mujer en ocupar la vicepresidencia de la República (2000-2004), a Milagros Ortiz Bosch se le reconoce por su extraordinario trabajo cuando estuvo al frente, en ese mismo periodo, de la Secretaría de Estado de Educación.
Como segunda al mando del Estado, además fungía como presidenta del Consejo Nacional de Discapacidad, y por 41 ocasiones ejerció la presidencia interina de la República ante las salidas y viajes del presidente.
En Educación le correspondió firmar los contratos de préstamos con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para establecer los Programas Multifases para la Educación Básica y Media. Creó y propició el Plan Estratégico de Desarrollo de la Educación para el período 2003-2012, y puso en funcionamiento las Juntas Descentralizadas de Educación a fin de que éstas se encargaran del mantenimiento de las escuelas. Bajo su gestión se realizó el primer censo nacional de infraestructura escolar. Se estableció el Concurso Docente como único mecanismo de ingreso a la docencia pública, creó el INAFOCAM y reorganizó las escuelas normales en el Instituto de Educación Salomé Ureña de Henríquez.
Otra mujer que dejó su impronta, y que dio un giro al dinamismo de trabajo de la Vicepresidenta, fue Margarita Cedeָño, quien lideró el Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales de la República Dominicana e impulsó el programa Progresando con Solidaridad, un ambicioso proyecto socio-pedagógico para impulsar el desarrollo humano y social.
Desde el 16 de agosto de 2012 hasta el 16 de agosto de 2020, la ex esposa del ex presidente Leonel Fernández tuvo un largo tiempo para asumir una serie de funciones importantes desde la Vicepresidencia por disposición del Poder Ejecutivo.
Por ejemplo, tenía a su cargo la dirección del Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales del gobierno, asignado por el Presidente Danilo Medina a través del Decreto no.474-12; se ocupaba de planificar y coordinar el Programa Progresando con Solidaridad (PROSOLI), que resultó de la fusión de los Programas Progresando y Solidaridad dispuesta por el Decreto no. 488-12; programa nacional de combate y lucha contra la pobreza extrema; por disposición del Decreto no.489-12, debía gestionar los Centros Tecnológicos Comunitarios (CTC), como parte de la Red de Protección Social del Estado dominicano.
De igual forma, ejercía como presidenta del Directorio de la Administradora de Subsidios Sociales (ADESS), entidad encargada de la unificación y entrega de los pagos de los subsidios sociales focalizados otorgados por el gobierno nacional a familias y poblaciones en condiciones de vulnerabilidad social y económica.
Y como si fuera poco, se encargaba de supervisar la dirección general del Sistema Único de Beneficiarios (SIUBEN), entidad responsable de crear, administrar y actualizar la base de datos de identificación y caracterización de los hogares pobres del país. Con esta información, el SIUBEN actualizaba el Padrón de Hogares Elegibles para recibir subsidios sociales y participar de programas sociales gubernamentales.
Sin duda, la figura de la mujer le ha dado un toque especial a la función de la Vicepresidencia, asumiendo un grado de mayor responsabilidad en el tren gubernamental.
Sin embargo, por la Vicepresidencia han pasado figuras como Rafael Alburquerque (2004-2012) que en su momento también tuvo a su cargo algunos programas sociales del Gobierno de Leonel Fernández, aunque muy por debajo de sus sucesoras en el mismo cargo.
Al ex vicepresidente Jacinto Peynado le confiaron pocas funciones extras, más allá del Consejo Nacional de Drogas, en el gobierno de Joaquín Balaguer (1994-1996). Algunos entienden que esto se debió a su rebeldía y a sus ambiciones políticas que Balaguer quiso mantener a rayas.
Un mayor rango de responsabilidades asumió su predecesor, Carlos Morales Troncoso, quien fue director del Consejo Estatal del Azúcar y embajador dominicano en Washington cuando fue vicepresidente de Balaguer (1986-1990 y 1990-1994).
Fue Jacobo Majluta, que en su calidad de vicepresidente, asumió la Presidencia Constitucional de la República en el periodo de transición del 4 de julio al 15 de agosto de 1982, tras el suicidio de Antonio Guzmán.
Es la misma Constitución que establece en su artículo 129, numeral 2, que: «En caso de falta definitiva del Presidente de la República, el Vicepresidente asumirá la Presidencia de la República por el tiempo que falte para la terminación del período presidencial».
Lo que establece la Constitución de la República
En su artículo 125 indica que: “habrá un o una Vicepresidente de la República, elegido conjuntamente con el Presidente, en la misma forma y por igual período. Para ser Vicepresidente de la República se requieren las mismas condiciones que para ser Presidente.”
Las atribuciones del o la Vicepresidente:
Colaborar con el Presidente de la República en la dirección de la acción del Gobierno;
Presidir determinadas reuniones del Consejo de Ministros en representación del o de la Presidente de la República, por instrucciones de éste o ésta;
Presidir aquellos órganos colegiados que decida el o la Presidente de la República;
Coordinar la ejecución de las políticas, planes, programas y actividades que le atribuya el o la Presidente de la República;
Suplir las faltas temporales y absolutas del o de la Presidente de la República, de conformidad con la Constitución;
Ejercer las atribuciones legales que le delegue el o la Presidente de la República;
Las demás que señale la ley.
Ley 247-12
De acuerdo a las disposiciones de la Ley 247-12, Orgánica de la Administración Pública, la Vicepresidencia de la República funge como órgano del gobierno del Estado y de máxima dirección de la Administración Pública, junto a la Presidencia de la República, el Consejo de Ministros y los ministerios creados por ley, de acuerdo a las disposiciones de su artículo 14.
De igual forma en el artículo 19, dicha legislación determina que “La Vicepresidencia de la República es un órgano de naturaleza unipersonal cuyo titular es el o la Vicepresidente, quién será colaborador inmediato del o la Presidente de la República en sus funciones como Jefe de Estado y de Gobierno, y ejercerá las funciones que aquel le atribuya de conformidad con la ley.”
