Santo Domingo. – En medio de la desesperación, tras tener 7 meses que no ve y no tiene ninguna información de sus dos hijas, una de 11 años de edad y la otra de 13, Radhaiza Ferreras Alcántara, llegó a las instalaciones de De Último Minuto para pedir ayuda a las autoridades competentes, pese a que su expareja, Edgar Cortes Viasus, raptó supuestamente a las menores alegando que ella las maltrataba.
Alcatara explicó que el secuestro de las pequeñas se dio mientras ella se encontraba trabajando y las niñas estaban en sus respetivos centros educativos, además de expresar que Viasus inmediatamente puso una denuncia en su contra, alegando maltratos físicos y psicológicos, de dejarlas solas y que esta nunca fue notificada por mencionada denuncia.
«Él raptó a las niñas mientras yo estuve trabajando; la llevó a una fiscalía, no se me llamó, no se me citó, no se me notificó, ni se me ha dicho el porqué de la situación». Solamente puse una denuncia por maltrato de agresión a las niñas. Yo quiero, por favor, para que en los medios de comunicación me ayuden y profundice en este caso con la investigación y vayan a la fiscal», sostuvo.
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También, manifestó que está recibiendo amenazas por parte de la abogada que está representando a su expareja: «La abogada que él tiene me está amenazando con quitarme todos los derechos de la niña, me está cuestionando que soy una mala madre, lo cual no lo soy; de ser así, no estuviera este reconocimiento, con mucho orgullo y mucho esfuerzo, de mis hijos. Tengo también reconocimientos escolares como niñas excelentes».
Igualmente, comentó que para perjudicarla y tener el poder de quitarle la custodia de sus hijas han levantado falsedades, incluso decir que las pequeñas han sido abusadas sexualmente por su propia progenitora, lo que pide a las autoridades practicarles los exámenes correspondientes para comprobar que dicha acción no fue realizada.
«Él ha dicho que la niña ha querido suicidarse, lo cual no es así, porque la niña tiene excelencia académica. Yo quiero que, por favor, me evalúen las niñas tanto sexualmente como psicológicamente, porque tengo una denuncia. También quiero que se investigue la fiscal que le entregó la niña, porque me armaron un expediente en Santo Domingo Este y yo vivo en Herrera, Santo Domingo Oeste.
Agregó: «He ido a audiencia, ya voy para tres o cuatro audiencias; no se me ha dicho nada, no me han dado una comunicación con las niñas, no sé dónde viven las niñas, en qué situación están y tampoco me han dado una comunicación con la niña. Solamente me armaron un expediente como si yo fuese una delincuente o una mala madre, lo cual no es así».
Ferreras Alcántara sostuvo que anhela que se investigue el caso y poder tener a sus hijas de vuelta, ya que se encuentra desperada y espera que se escuche su clamor de madre afligida.
“Yo quiero que, por favor, esto se investigue, se profundice y me ayuden porque he tenido que venir aquí porque estoy desesperada. Estoy cansada de ir a audiencia, cita, cita y cita y no he tenido ninguna comunicación con las niñas, ni siquiera por vía telefónica. Estoy desesperada, le estoy dando el clamor de una madre desesperada».
