Montevideo.- Los ministros de Ambiente, Adrián Peña, y Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, viajan al oeste de Uruguay para conocer el alcance de los daños causados por los incendios registrados en la zona, que afectaron 22.000 hectáreas en los últimos días.
Según la información brindada por el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), unas 22.000 hectáreas de terreno se vieron afectadas por el fuego en los departamentos (provincias) de Río Negro y Paysandú, ambos en el oeste del país y, aunque siguen persistiendo algunos focos de calor, la situación está «bajo control».
La ola de calor registrada en los últimos días de 2021 y la extrema sequedad de los campos favorecieron la aparición de varios focos que llevaron al peor incendio registrado hasta el momento en Uruguay, según informó el diario local El País.
El de mayor terreno quemado registrado hasta el momento (5.000 hectáreas) databa de 2005 y se desató en varias localidades de Rocha (sureste del país), según la publicación.
De acuerdo con fuentes de la cartera de Ambiente, ambos integrantes del gabinete de Luis Lacalle Pou se desplazarán a las localidades de Piedras Coloradas (Paysandú) y Tres Quintas (Río Negro), perjudicadas por varios incendios en los últimos días de 2021 y comienzos de 2022.
Peña y Mattos mantendrán diversos encuentros con autoridades locales, productores ganaderos y apicultores de ambas localidades del oeste uruguayo para conocer de primera mano el alcance del perjuicio causado por los incendios.
La visita comienza en Piedras Coloradas, lugar al que se desplazó el 1 de enero el mandatario uruguayo, Luis Lacalle Pou, quien fue recibido por los intendentes (gobernadores locales) de Paysandú, Nicolás Olivera, y Río Negro, Omar Laluf.
Posteriormente, los ministros viajarán a Tres Quintas, donde también se reunirán con vecinos afectados.
En declaraciones a los medios públicos, Pablo Benítez, portavoz de Bomberos, calificó este lunes la situación actual como «crítica de peligro de incendios» y apuntó que en las últimas horas se registraron unos 100 —de mayor o menor intensidad— en todo el país.
No obstante, la intensa lluvia caída durante el fin de semana en las zonas más afectadas ayudó a mitigar el fuego y a acotar el área en que deben trabajar las dotaciones de bomberos.
