Santo Domingo. – El Ministerio Público reveló que los principales imputados en los alegados casos de corrupción Coral y Coral 5G utilizaban un esquema piramidal para sustraer fondos de nóminas del Estadio.
En ese sentido, el expediente acusatorio puntualizó que en el caso del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (CESTUR), el acusado Juan Carlos Torres Robiou, aprobaba la entrada y salida constante de personas a la nómina de dicha institución.
Asimismo, destalló Rafael Núñez de Aza y Raúl Alejandro Girón Jiménez, junto al coronel Yehudy Blandesmil Guzmán Alcántara FARD, quien, junto al teniente coronel José Ramón Santos Jiménez de la Policía Nacional; el segundo teniente Vicente Girón Jiménez FARD; el teniente Eringson Brens Rosario ERD, el Tte. Winston Guzmán Jiménez P.N., y 1er Tte. Juan Ramón Tejada Hilario FARD, se encargaban del reclutamiento de personas a incluir y de las creaciones de subredes o eslabones de la pirámide que les respondían a estos.
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De igual modo, el órgano judicial destacó que a los mismos se les llamaba dentro de la estructura criminal, “cabezas recolectoras”.
Asimismo, el documento del caso subrayó que en las operaciones del Cuerpo de Seguridad Presidencial (CUSEP), el implicado Adán Benoni Cáceres Silvestre aprobaba los nombramientos de personas y se colocaba de forma directa en la nómina de dicha institución.
Explicó que esto le daba más facilidad, puesto que dicha institución no estaba bajo la supervisión de la Contraloría General de la República. Según el expediente, posterior a dichas aprobaciones, el gerente financiero, Rafael Núñez de Aza, a través del Tte. coronel José Ramón Santos Jiménez y posteriormente por Raúl Alejandro Girón Jiménez, hacían transferencias electrónicas a las cuentas de las personas incluidas en dichas nóminas.
Coral y Coral 5G
Asimismo, especificó, que en el CUSEP se encargaban de reclutamiento de personas a incluir en la nómina y manejaban las subredes de recolección, Santos Jiménez, el mayor José Manuel Rosario Pirón, el capitán Pedro Roberto Castillo Nolasco, Vicente Girón Jiménez FARD y el 1er Tte. Juan Ramón Tejada Hilario FARD, a quienes reiteró le llamaban dentro de la estructura criminal, cabezas recolectoras.
Además, El Ministerio Público resaltó que el modus operandi era similar en ambas instituciones.
“Las cabezas recolectoras reclutaban militares que estuvieran asignados a otras instituciones, o que no tuvieran funciones en específico, luego presentaban los candidatos a Raúl Girón Jiménez quien los depuraba junto a su superior, Núñez de Aza y solicitaban la incorporación de los mismos, aprobado por Torres Robiou en CESTUR y por Adán Cáceres Silvestre en CUSEP, quienes habían ideado el formato para la distracción de los fondos público”, explicó el expediente acusatorio
Destacó, que las personas que pasaban la depuración eran agregadas a las nóminas de CUSEP o CESTUR, con salarios de entre 20 mil y 70 mil pesos mensuales, los cuales debían ser devueltos en su totalidad, y en otras ocasiones los “supuestamente nombrados” eran autorizados a quedarse con montos que van desde 2 mil hasta 10 mil pesos, dependiendo de la cantidad asignada, y el resto debían devolverlo a las “cabezas recolectoras”.
También, detalló que las “cabezas recolectoras” le entregaban la mayor parte del dinero al acusado Girón Jiménez, de forma directa, o a través de su hermano Vicente Girón Jiménez, luego hacia entrega en efectivo a Núñez de Aza y este cubría los gastos y compromisos, además de adquirir propiedades para sus superiores Juan Carlos Torres Robiou y Adán Benoni Cáceres Silvestre y demás miembros del entramado.
