Ginebra.- Expertos de la ONU criticaron hoy el excesivo uso de las pistolas eléctricas incapacitantes, también conocidas como táser, entre la policía de EEUU, y pidieron una investigación profunda de las recientes muertes de los afroamericanos Tyre Nichols y Keenan Anderson, atacados con este tipo de armas.
Pese a ser considerados como armas no letales, «son usados como protocolo de rutina (por agentes de seguridad) contra individuos que muestran resistencia o presentan crisis nerviosas, y que a menudo no suponen una amenaza», denunció en un comunicado uno de los expertos, el argentino Juan Méndez.
«Nos sigue preocupando enormemente su excesivo uso por parte de las fuerzas de seguridad», agregó Méndez, uno de los tres miembros del mecanismo de expertos para investigar abusos y conductas racistas en cuerpos policiales, creado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a raíz del asesinato de George Floyd en 2020.
Él y otros cuatro expertos firmantes aseguraron que este tipo de armas en teoría no letales «pueden matar, causar graves heridas y discapacidades permanentes».
Acerca de las muertes de Nichols (ocurrida el 7 de enero en Memphis) y Anderson (cuatro días antes en Los Ángeles), los expertos aseguraron que la fuerza usada contra ellos por los agentes podrá haber violado las normas internacionales que prohíben torturas, maltratos y otros castigos crueles o degradantes.
«Son otro recuerdo de que hay que actuar con urgencia», afirmó Yvonne Mokgoro, presidenta del mecanismo de la ONU, quien señaló que han solicitado a las autoridades de EE. UU. información detallada sobre los dos sucesos, así como sobre el curso de las investigaciones internas.
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También recomendaron a estas autoridades que «muestren determinación a la hora de reformar unas prácticas policiales permisivas con el asalto criminal disfrazado de aplicación de la ley».
La relatora de la ONU contra la tortura, ALice Jill Edwards, agregó que la policía «tiene por deber proteger a los ciudadanos y respetar sus derechos, y cuando estas funciones básicas se sustituyen por violencia ilegal e incontrolada, ello causa que la gente de a pie tema a los mismos agentes policiales».