París.- Los organizadores de los Juegos Olímpicos de París se disculparon este domingo con cualquiera que se haya sentido ofendido por una escena que evocó “La Última Cena”, de Leonardo da Vinci, durante la glamorosa ceremonia de inauguración.
La pintura de Da Vinci representa el momento en que Jesucristo declaró que un apóstol lo traicionaría.
La escena durante la ceremonia del viernes presentó a la DJ y productora Barbara Butch, un ícono LGBTQ+, flanqueada por artistas drag y bailarines.
Los conservadores religiosos de todo el mundo condenaron el segmento, y la conferencia de obispos de la Iglesia católica francesa deploró las “escenas de burla” para el cristianismo, un sentimiento del que hizo eco la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova.
La Comunión Anglicana en Egipto expresó su “profundo pesar” y dijo que la ceremonia podría hacer que el COI “pierda su identidad deportiva distintiva y su mensaje humanitario”.