El presidente Luis Abinader, ante los últimos hechos violentos que se han registrado en el país, dejó iniciado el patrullaje mixto, que está integrado por agentes policiales y militares.
El mandatario envío un mensaje claro y contundente a los desaprensivos que se han dedicado a mantener en zozobra a la población.
«No negociaremos la tranquilidad con mafiosos, les exhortamos que se entreguen por la vía correspondiente ya que no habrá tregua», dijo el gobernante en compañía del ministro de Interior y Policía, Jesús (Chú) Vásquez; los generales del Ejército, mayor general Julio Ernesto Florián Pérez; de la Armada, vicealmirante Ramón Gustavo Betances y de la Fuerza Aérea, general Leonel Amílcar Muñoz Novoa, así como el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), vicealmirante José Manuel Cabrera Ulloa, el comisionado ejecutivo para la reforma de la Policía, José Viña del Castillo y miembros de la plana mayor de la Policía.
El mandatario instruyó al director de la Policía Nacional y al ministro de Defensa a actuar apegados al respeto de los derechos humanos, pero que no les tiemble el pulso para enfrentar la delincuencia.
«Los primeros derechos humanos que tenemos que respetar son los de nuestra gente seria y honesta que necesitan caminar tranquilos por nuestras calles y estar seguros en nuestras casas. Seguiremos esta operación hasta que sea necesario y si tenemos que incrementar la vamos a incrementar», afirmó el mandatario.
El jefe de Estado dio estas instrucciones momentos en que la población vive tiempos ácidos por los múltiples robos y atracos en las distintas localidades del país.
«Confío plenamente en las actuaciones de la Policía Nacional y sé que van a actuar en respeto a los derechos humanos, pero con la firmeza que se necesita en estas circunstancias», dijo Abinader.
Estas declaraciones fueron pronunciadas previo a la reunión con el Consejo Superior Policial, donde se analizaría la aprobación de reglamentos de aplicación de la Ley Orgánica de la Policía Nacional.