Nueva York.- Los agentes remesadores de divisas con agencias en la ciudad y suburbios del estado, confirmaron que el envío de remesas a la República Dominicana ha caído entre 15 a 10% en los últimos meses de 2022 debido a la inflación que afecta a los Estados Unidos.
Los dominicanos en el exterior, principalmente en Estados Unidos, superaron en 2021 las cifras de 2020 de remesas con el envío de $10,402 millones de dólares a su país, por debajo de México y Guatemala cuyos nacionales remitieron 51,594 y 15,296 millones respectivamente en el mismo año, acorde con datos ofrecidos por la empresa World Remit, especializada en el área.
El empresario Plácido Rodríguez, presidente de la Asociación Dominico Americana de Agentes de Viajes (DATA), propietario de la agencia Quisqueya Tours y uno de los principales remesadores del Alto Manhattan, confirmó el porcentaje basándose en el movimiento de envíos, principalmente a través de Caribe Express desde su negocio..
El factor principal para impulsar los envíos récords de 2021 fue el de las ayudas pandémicas que otorgaron los gobiernos de Donald Trump y Joe Biden, el primero en sus últimos días de ejercicio y el primero al comienzo de su gestión.
Los desempleados que fueron beneficiados con el subsidio por desempleo del Departamento de Trabajo recibieron millares de dólares durante los meses de la pandemia y por la colección de los correspondientes a los salarios que dejaron de percibir a causa de COVID-19.
Los pequeños y medianos negocios también fueron beneficiados con millones de dólares en préstamos sin retorno, lo que permitió a desempleados y empresarios sostenerse y mantener los negocios abiertos.
Pero después que vencieron los plazos para las ayudas por la pandemia, el Gobierno de Biden ni los gobiernos locales, gobernación y alcaldía en control de los demócratas, han vuelto a tenderle la mano a los más necesitados.
Concluida la fase de la llamada colecta por desempleo, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul dijo que el dinero de los fondos de miles de millones que le había agenciado el Gobierno federal se habían acabado y terminó la ayuda con ese discurso.
De ahí en adelante, la gobernación no ha renovado el compromiso de los demócratas para ayudar a las clases trabajadoras de Nueva York a las que la inflación se está tragando inmisericordemente.
La Casa Blanca ha rechazado iniciativas para aprobar un nuevo paquete que incluya nueva ayuda con cheques a las familias empobrecidas, situaciones que hacen imposible que las remesas mantengan su nivel o aumenten.
Los especialistas en la materia pronostican que por el contrario, el envío de divisas seguirá cayendo.
La decisión de Biden ha producido reacciones iracundas mayoritariamente de los hispanos que le dieron su voto y lo impulsaron a llegar a la Casa Blanca, alegando que ahora el mandatario les da la espalda y prefiere llenarle la panza con millares de millones a los ucranianos para mantener una guerra en la que Estados Unidos no tiene voz ni voto.
Una reciente encuesta divulgada el viernes por la firma co/efficient otorga una diferencia de 49-43% a favor de Hochul que será enfrentada por el republicano Lee Zeldin, con solo 4 puntos de distancia a diferencia de los 24 que le llevaba la gobernadora al opositor hace apenas unos meses.
Los porcentajes de la encuesta son un reflejo de la respuesta de los neoyorquinos a la política económica de Hochul y Biden, que está poniendo en riesgo gran parte de las bancadas demócratas en el congreso en las elecciones de noviembre 2022.
Y amenaza con arrebatar la Casa Blanca a los demócratas en 2024. Los observadores, analistas y críticos de Biden sostienen que no son los republicanos los que despojarán del triunfo a los demócratas, sino la política económica errática e indolente que da la espalda a los más pobres para beneficiar a un grupito de corruptos ucranianos.
En las calles y lugares donde se congregan gran cantidad de latinos, el grito por la crisis inflacionaria es el mismo, acusando a Biden de tener gran responsabilidad por preferir a Ucrania antes que a sus propios connacionales estadounidenses.
El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) se muestra acorde con que el descenso de las remesas se debe al cierre en septiembre 2021, de los programas de ayuda que dio el Gobierno de estados Unidos por la pandemia.
El BCRD dijo el jueves que las remesas a República Dominicana bajaron a $6,528.8 millones de dólares durante los primeros 8 meses 2022, una diferencia en baja de $512.9 millones en relación a las remesas enviadas en 2021.