Kais Saied, presidente de Túnez, destituyó de sus cargos a 57 jueces, entre ellos quien encabezara el Consejo Judicial Supremo, informa la agencia Reuters.
Saied acusa a los letrados de corrupción y de obstruir investigaciones de casos relacionados con terrorismo. En un discurso televisivo, aseguró que les había dado muchas oportunidades y advertido al poder judicial «que se purificara».
Horas después, el diario oficial publicó un decreto anunciando los despidos.
La purga judicial se produce días después que Saied anunciara la disolución del Parlamento, en medio de una crisis política y social marcada por violentas manifestaciones en protesta por la situación que se ha generado en el país debido a la pandemia y a problemas económicos.