El anuncio del recorte del suministro de gas ruso a Europa occidental desde el 27 de julio anunciado por Gazprom no tiene «razones técnicas», según declaró el Gobierno alemán tras conocerse la decisión del suministrador ruso.
«Hemos tomado nota del anuncio. Observamos la situación muy de cerca en estrecho contacto con la Agencia Federal de Redes y el equipo de crisis del gas«, según el ministerio alemán de Economía y Protección del Clima.
«Según nuestras informaciones no existen razones técnicas para una reducción de los envíos«, agregó la nota del ministerio.
«Se han cumplido los requisitos de aprobación de sanciones para la entrega de la turbina en cuestión. Canadá ha concedido la exención exigida por la legislación canadiense. De acuerdo con la ley de sanciones de la UE, no se requiere exención«, explica la nota.
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La declaración se conoce después de que el gigante gasístico ruso anunciara una nueva reducción de los suministros de gas por el gasoducto Nord Stream; a 33 millones de metros cúbicos diarios, a partir del 27 de julio, debido a la necesidad de detener otra turbina debido a su estado técnico.
«A partir de las 7.00 hora de Moscú la productividad diaria de la estación de bombeo Portóvaya será de 33 millones de metros cúbicos diarios«, informó la empresa.
Gazprom vinculó esta nueva reducción al estado técnico de una turbina tras cumplirse el plazo para una nueva reparación capital.
Actualmente Rusia suministra sólo el 40 % de los flujos habituales de gas debido a que espera la devolución de una de sus turbinas Siemens; que estuvo bloqueada en Canadá debido a las sanciones por la campaña militar rusa en Ucrania y en la actualidad está en camino de vuelta.
El proceso se ha visto dificultado debido a las exigencias de Gazprom; que afirma que la documentación entregada por Canadá y Alemania no elimina los riesgos vinculados a las sanciones y «generan preguntas adicionales»; en particular, los relacionados con la reparación futura de otras turbinas.
A mediados de junio, Gazprom redujo al 33 % su capacidad de suministro de gas, hasta 67 millones de metros cúbicos diarios; también debido a la necesidad de parar una turbina para reparaciones, y en julio detuvo el bombeo para «labores de mantenimiento planificadas».
Tras una pausa de diez días, Nord Stream arrancó con una capacidad del 40 %, que quedará reducida a la mitad.