Washington.- Varios cientos de personas se manifestaron este lunes frente a la Casa Blanca para lanzar al presidente de EE.UU., Joe Biden, un «SOS» por Cuba y denunciar las presuntas violaciones a los derechos humanos ocurridas durante las recientes protestas en la isla.
La protesta comenzó en la plaza Lafayette, situada al frente de la residencia presidencial y continuó con una marcha que finalizó frente a la embajada de Cuba en Washington.
«Estamos pidiendo, llamando la atención, pidiendo un SOS internacional para que la Administración de Biden por favor mire hacia la isla de Cuba que están siendo masacrados», dijo a Efe el opositor Eliécer Góngora Izaguirre, miembro de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu).
Junto a él -quien viajó desde Miami- decenas de sus compatriotas llegaron a Washington para sumarse a una colorida y bulliciosa concentración, en la que sobresalían banderas del país caribeño, así como camisetas o carteles en los que se leía «SOS Cuba» o «Patria y Vida».
Los manifestantes se congregaron para reclamar a Biden más medidas contra el Gobierno de Cuba, país contra el que pesa un embargo impuesto por Washington desde hace ya más de seis décadas y que en los últimos años ha sentido el rigor de las sanciones ordenadas por el Gobierno del ahora expresidente Donald Trump (2017-2021).
Para Góngora, quien denuncia haber sido expulsado en febrero de 2019 de su país por las autoridades, la respuesta de Biden hasta ahora ha sido «bastante floja».
«No es sanciones lo que estamos pidiendo», subrayó Góngora, quien consideró que el clamor es que «la dictadura salga de raíz».
Por su parte, Ana Belkis Ferrer, hermana del disidente José Daniel Ferrer, líder de Unpacu, aseguró a Efe que siguen sin saber nada de él ni de su hijo desde que ambos fueran «injusta y arbitrariamente detenidos o secuestrados» el pasado día 11.
Ferrer llamó al Gobierno de Biden y al resto de países del mundo a tener «solidaridad» con Cuba y a apoyar medidas «firmes» contra «la dictadura» porque de lo contrario no podrán «quitársela de encima».
Esta activista, quien exhibía una pequeña fotografía de su hermano, se unió a las voces de quienes reclaman una «intervención humanitaria» y un servicio de internet continuo que permita a los cubanos «denunciar todas las injusticias».
Este lunes, los Gobiernos de 21 países, incluidos Estados Unidos y cinco latinoamericanos, condenaron los «arrestos y detenciones masivas» de manifestantes en Cuba y exigieron el respeto de los derechos humanos en la isla.
El jueves pasado, el Gobierno de Biden anunció sanciones contra el ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba, Álvaro López-Miera, y contra una unidad militar de élite conocida popularmente como «avispas negras» o «boinas negras» y advirtió que «es solo el comienzo».