Santo Domingo.- En las recientes elecciones municipales del 18 de febrero, Dio Astacio emergió como el alcalde electo de Santo Domingo Este. Sin embargo, una encuesta realizada por De Último Minuto arrojó luz sobre los desafíos que enfrentará Astacio al asumir su cargo, destacando la problemática de la basura como el principal inconveniente que aqueja a la ciudad.
«Yo espero que él limpie bien la calle, y que como él lo prometió, él cumpla su palabra y no quede en el aire como muchos políticos» – Freddy, residente de Santo Domingo Este.
La encuesta, llevada a cabo entre los residentes de Santo Domingo Este, reveló que la acumulación de basura es percibida como el problema más urgente y evidente por parte de los ciudadanos. Ante la pregunta sobre qué esperan de la gestión de Dio Astacio, la mayoría expresó su esperanza de que aborde eficazmente esta cuestión que afecta la calidad de vida y el aspecto estético del municipio.
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«Que recoja la basura, hay mucha basura en el sector, mucha por todos lados, eso es un desorden muy fuerte», expresó Adalberto Chávez, vecino del municipio.
De su lado, Fausto de la Rosa, manifestó «La basura va a seguir igual, la capital llena de basura, porque los sucios somos nosotros mismos».
Además del problema de la basura, los ciudadanos destacaron otros desafíos que requieren atención inmediata por parte de las autoridades municipales entrantes. Entre estos desafíos se incluyen preocupaciones sobre seguridad ciudadana, la necesidad de reparar calles plagadas de baches, la presencia alarmante de delincuentes y personas sin hogar en los parques locales, así como la proliferación de animales callejeros.
En relación con la elección de Astacio como alcalde, muchos residentes recordaron las promesas y propuestas hechas por el nuevo líder durante su campaña. Astacio había abordado estas preocupaciones en sus discursos políticos, generando esperanzas entre los votantes de que tomaría medidas concretas para abordar los desafíos más apremiantes de la comunidad.
Sin embargo, a pesar de la confianza inicial en el liderazgo del dirigente político, algunos residentes expresaron su preocupación por la posibilidad de que el poder político pueda corromperlo, como ha sucedido con otros líderes en el pasado. Aunque reconocen su trasfondo como pastor religioso, temen que las tentaciones inherentes al cargo puedan socavar sus buenas intenciones y compromiso con el servicio público.
«Que sea un síndico ejemplar, que no se lleve de las apariencias de los demás, porque como él es pastor, a veces el que entra en el camino del señor, no puede tener un cargo público, porque lo corrompen, pero creo que él no va a llegar ahí», indicó Miguel Morillo.
En cuanto al calendario político, se espera que las autoridades municipales electas asuman sus cargos el 24 de abril, coincidiendo con la conmemoración de la revolución de abril. Este período de transición ofrece una oportunidad crucial para que Astacio y su equipo comiencen a abordar los desafíos identificados por la comunidad y establezcan un rumbo claro para el futuro del municipio.
