lunes, mayo 13, 2024

Héctor Lavoe, a 30 años de su partida; dan repaso a la vida del «Cantante de los cantantes»

Este jueves 29 de junio se cumplen 30 años de la desaparición física del increíble Héctor Juan Pérez Martínez, popularmente conocido como Héctor Lavoe, originario de Ponce, Puerto Rico, y apodado “Cantante de Cantantes”.

A pesar de ya pasaron tres décadas, Lavoe sigue siendo uno de los referentes más importantes de lo que hoy en día conocemos como Salsa, género que unió varios ritmos de la música afrocubana y afro caribeña en medio de una efervescencia cultural anglo-latina vibrante en el Nueva York de los años 60.

A los 14 años, Héctor ya cantaba en su Puerto Rico natal, ganando poco más de $18 dólares la noche, sueldo más que aceptable para un niño de su edad. Ya en su temprana interpretación podías escuchar sus mayores influencias como: Chuito el Bayamón, Otilio González, Roberto Faz o Daniel Santos y por su puesto voces como: Cheo Feliciano o Ismael Rivera fundamentaron su formación como cantante.

Puedes leer: Informe revela aumento de violencia contra mujeres en Colombia

A los 16 años llegó a Nueva York buscándose la vida como cualquier otro inmigrante, limpiavidrios, conserje, mensajero, maletero, por nombrar algunos trabajos, hasta comenzar a frecuentar los clubes y salones de baile latinos en El Bronx y el bajo Manhattan. Comenzó como bolerista en un sexteto. De ahí paso a la New Yorker Band como corista y maraquero. Al mismo tiempo participaba itinerantemente en otras agrupaciones como: Alegre All Stars y Francisco ‘Kako” Bastard y su orquesta, donde conocería a su padrino artístico, Johnny Pacheco. Este le propondría al joven Héctor conocer y grabar con otra joven promesa musical, Willie Colón.

Héctor Lavoe llega a FANIA

“Cuando me ofrecieron grabar para el sello FANIA, no lo creí. Cuando conocí a Johnny Pacheco, lo primero que me dijo fue: -Hay que buscarte un cantante-… Yo en ese momento tocaba en el Club de la Legión Americana, en la 162 y Prospect Avenue, y en el piso de arriba, el Ponce Social Club, tocaba otra orquesta: The New Yorkers. Ellos tenían un cantante jovencito, jincho, feo y flaco. Se llamaba Héctor Juan Pérez Martínez. Fui con Pacheco a ofrecerle que grabara con nosotros ese primer disco. Para mí era duro, porque mi cantante llevaba años conmigo.

Lo peor fue que Héctor me contestó bien guapetón: Yo no quiero grabar contigo, man… Ustedes están bien, bien flojos. ¿Por qué se negó? Con el tiempo me dijo, despechado, que fue porque en aquel momento no le había ofrecido entrar en la orquesta, solo grabar. Héctor y yo entendimos que nuestra unión era algo necesario y natural”, dijo el que fue por años su compañero y mejor amigo, Willie Colón.

En el foco

Patrocinado por:

Top 5 esta semana

Explora más