Santo Domingo. - Por recomendación y temor a su seguridad, el empresario Antonio Espaillat no se presentó en la zona cero de la tragedia del Jet Set tras el colapso del techo del establecimiento de diversión que dejó un saldo de 232 muertos la madrugada del 8 de abril.
Sostuvo que al llegar al país se trasladó a su oficina donde se encontraban sus familiares y unos amigos. para conocer la situación, destacando que fueron estos quienes le instaron no ir al lugar del hecho porque los “ánimos ya estaban caldeados”.
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“Llegue a mi oficina que estaba mi familia ahí y estaban unos amigos para que me informaran lo que había pasado, ya estaba muy avanzado todo y por un tema de seguridad me dijeron que no vaya porque ya estaban los ánimos caldeados y demás y no se podría saber que podría pasar en torno a mí”, dijo Espaillat.
Asimismo, manifestó que se enteró de la tragedia tras una llamada de su hermana a las 1:30 de la madrugada mientras esta se encontraba bajo los escombros.