Varios propietarios de coches eléctricos Tesla en EE.UU. expresaron su frustración con la compañía luego de que esta semana se anunciaran repentinas rebajas en los vehículos más populares en el mercado estadounidense de hasta el 20%, en un esfuerzo de la firma por impulsar las ventas.
«Siento que me engañaron», manifestó Marianne Simmons, citada por la revista Fortune, que pagó en septiembre más de 77.000 dólares por su Tesla Model Y y esta semana se dio cuenta de que el mismo coche podría haberle costado 13.000 dólares menos. «Es una rebaja tan grande que va a afectar a muchas personas que acaban de comprar un vehículo», señaló.
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Ivan Drury, director de información del sitio especializado en venta de automóviles Edmunds.com, opina que los recortes de precios de los vehículos eléctricos nuevos afectarán al valor de reventa de inmediato. «Cualquiera que haya comprado un Tesla recientemente sentirá un impacto inmediato y deseará haberlo alquilado», enfatizó.
Austin Flack, dueño de un Tesla Model 3 2018, relató que el pasado diciembre puso su automóvil en venta a 51.000 dólares, luego lo bajó a 36.000 cuando Tesla anunció rebajas en sus productos a fin de año, y probablemente ahora se vea obligado a pedir solo 30.000 dólares.
Por su parte, Jack Bradham denunció que encargó a fines del año pasado un Model Y, pero en la empresa le dijeron que tendría que esperar hasta enero para tenerlo. Luego, en diciembre Tesla se comunicó con él y le ofreció el coche para la Navidad a 69.000 dólares y él aceptó. Sin embargo, ahora se arrepiente de su decisión, porque podría haber gastado 12.000 dólares menos si lo hubiese comprado en enero.
Bradham dice que entiende que a veces los compradores se pierdan una oferta, pero lo que le molesta es el tamaño de la reducción de precios junto con la falta de comunicación por parte de la compañía propiedad de Elon Musk.
En un episodio similar, centenares de propietarios chinos de Tesla protestaron la semana pasada en centros de distribución de la compañía en el país asiático, exigiendo reembolsos por sentir que habían pagado de más por los autos adquiridos antes de las repentinas rebajas.
