Boca Chica.- En medio de profundo pesar, familiares, vecinos, y abogados se reunieron este miércoles para velar los restos de Eladia Ozuna Reyes de 92 años, desalojada junto a su familia de los terrenos donde hoy opera el Aeropuerto Internacional de las Américas (AILA), murió sin recibir la indemnización de 85 millones de pesos que le correspondía por sentencia judicial.
Vecinos y amigos de Eladia Ozuna recordaron a la fallecida como una mujer generosa y alegre, cuyo legado va más allá de los terrenos en disputa. Víctor Colón, residente de la comunidad, compartió: “Ella era como una madre para muchos aquí. Era una mujer que siempre estaba contenta, positiva, y dispuesta a ayudar a los demás. Es penoso que una persona que luchó tanto por lo suyo haya muerto sin poder disfrutar lo que le correspondía”.
El caso de Eladia Ozuna ha sido calificado como una muestra de las fallas estructurales del sistema legal y administrativo del país. Según declaraciones del abogado Martín Mañón Lara, la falta de pago del gobierno no solo violó la sentencia emitida en 2021, sino que también prolongó innecesariamente el sufrimiento de Ozuna y su familia.
“Esto es una situación que no debió darse. La sentencia estaba presupuestada desde 2022, pero no hubo forma de que el Estado cumpliera. Incluso, recientemente el director de Hacienda informó que el pago podría realizarse en 2026. Ya la señora murió, y su fallecimiento está directamente relacionado con la pena y las dificultades que enfrentó por la negligencia gubernamental”, expresó Mañón Lara, abogado de la familia.
Puedes leer: Señora a la que el gobierno le adeuda 85 millones por terrenos del AILA se encuentra en UCI
El abogado también cuestionó declaraciones del director de comunicación de Aerodom, quien afirmó que los terrenos eran del Estado. “Eso es falso. Solo el Registro de Títulos puede determinar la propiedad de un terreno. Si Aerodom firmó un contrato sin investigar la legitimidad de los propietarios, se trata de un contrato ilegal”, agregó.
Patricio Mañon Amador, otro de sus abogados, señaló que la familia de Ozuna continúa en una situación de vulnerabilidad económica. “Ahora tienen que enfrentar nuevos problemas: pagar impuestos sucesorales, asumir deudas de la clínica, y esperar más años para que el gobierno cumpla con lo que ya es un derecho ganado por sentencia”, expresó.
Francisca Rosario, vecina cercana, destacó la calidad humana de Ozuna: “Era una bendición para todos. Siempre estaba sonriente, nunca hubo conflictos con ella, y sus hijos han seguido su ejemplo, siendo personas muy queridas en la comunidad”.
Los abogados de la familia anunciaron que iniciarán un proceso de determinación de herederos para garantizar que el Estado cumpla con la sentencia y entregue el dinero a los familiares de Ozuna. Patricio Meñón Amador, otro representante legal, hizo un llamado al gobierno para que tome responsabilidad en el caso. “No estamos pidiendo un favor; estamos exigiendo el cumplimiento de una sentencia. La familia merece justicia, aunque sea tardía. El Estado tiene una deuda moral y legal con ellos”, afirmó.
El fallecimiento de Ozuna ha generado un sentimiento de indignación entre los residentes de Boca Chica, quienes consideran que su caso refleja las desigualdades sociales y la falta de equidad en el país. “Es lamentable que el gobierno pague sumas millonarias por otros terrenos, pero no haga lo mismo con alguien de origen humilde como Eladia. Si ella hubiera tenido un apellido poderoso, ya habría recibido su dinero”, comentó un vecino.
El legado de Eladia Ozuna Reyes perdurará como un recordatorio de la lucha por la justicia en un sistema que, según muchos, aún tiene grandes deudas con los sectores más vulnerables.
