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Redacción internacional.– La capital, Puerto Príncipe, se encuentra tensa ya que este domingo bandas armadas se encontraban con balas resonando por doquier. En Delmas, los bandidos saquearon, quemaron casas y se enfrentaron con la policía. En el fondo de la ciudad y en algunas partes de Pétion-Ville, se escucharon disparos. Al menos una persona murió en el centro de la ciudad. Esta situación se da en un contexto en el que se espera que el Consejo Presidencial asuma sus funciones esta semana, según las últimas informaciones.
La ciudad de Puerto Príncipe, la capital de Haití, está sumida en un clima de tensión, ya que la instalación del Consejo Presidencial para reemplazar al actual gobierno está programada para esta semana. Las detonaciones resuenan mientras se desarrollan escenas de violencia y caos en varios barrios. Desde anoche, los bandidos han estado atacando la Facultad de Medicina y comenzando a saquearla. El sistema de energía solar ha sido robado. Según los informes, tienen la intención de utilizarlo como base desde la cual enfrentarse a las fuerzas del orden. Al menos una persona fue asesinada a tiros en la calle Capois.
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Además, en la zona de Delmas, más concretamente en Bas-Delmas, las bandas armadas están llevando a cabo actos de saqueo e incendio, sembrando el terror entre los habitantes que ya sufren la situación caótica a la que se enfrentan. Las fuerzas de seguridad están tratando de contener la violencia.
Los barrios bajos de la ciudad y la comuna de Pétion-Ville no se libran de esta espiral de violencia. Los residentes viven con el temor constante del fuego cruzado.
La creciente tensión se produce mientras el Consejo Presidencial se prepara para asumir el cargo esta semana. Se dice que los bandidos armados, que se oponen ferozmente a la aplicación de esta nueva transición, tratan de perturbar el proceso sembrando el caos y el terror entre la población.
Al final de la semana se llevó a cabo una reunión entre el Consejo Presidencial y el gobierno saliente. También se dieron garantías para la instalación del Consejo Presidencial. La lluvia de balas en toda el área metropolitana no augura nada bueno.
