París. El legendario nadador Michael Phelps ha exigido sanciones de por vida para cualquier atleta que resulte positivo en controles de dopaje, en medio del reciente escándalo que involucra a la natación de China.
«Si das positivo, nunca se te deberían permitir volver a competir, así de simple», afirmó Phelps. «Creo que es una y ya está».
La controversia surgió cuando se reveló que 23 nadadores chinos dieron positivo en pruebas de dopaje antes de los Juegos Olímpicos de Tokio. Sin embargo, tanto la Agencia Mundial Antidopaje como World Aquatics aceptaron la explicación de China, que atribuyó los resultados a alimentos contaminados. Nueve de estos nadadores ganaron medallas, varios como parte del equipo de relevos que compitió en París, lo que llevó a la estrella británica Adam Peaty a quejarse de que la competencia no era justa.
Phelps, en apoyo a Peaty, enfatizó que estos nadadores no deberían haber competido ni en Tokio ni en París. «O en cualquier otro lugar, de hecho», añadió.
Durante su carrera, Phelps fue sometido a rigurosas pruebas antidopaje para demostrar que sus logros eran limpios, especialmente antes de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, donde ganó ocho medallas de oro, rompiendo el récord de Mark Spitz.
«La gente me llamó tramposo durante toda mi carrera», recordó Phelps. «Me sometí a más pruebas, de sangre y orina, semanalmente. ¿Por qué? Para poder comprobar que no estaba haciendo trampa y que estaba limpio».
Con 23 medallas de oro olímpicas en su haber, Phelps subrayó que es posible alcanzar estos logros sin el uso de sustancias prohibidas. Expresó su comprensión hacia la frustración de atletas como Peaty, cuyo equipo terminó cuarto en el relevo masculino de 4×100 metros estilo libre el domingo, en una carrera ganada por el equipo chino.
«Me rompe el corazón ver a gente que se esfuerza tanto durante cuatro años para prepararse para unos Juegos Olímpicos y luego que alguien que hace trampas les arrebate ese esfuerzo», concluyó Phelps. «No está bien».
