Santo Domingo. — Carmen Joselin de la Cruz, entre lágrimas, clama por saber si su hijo sobrevivió al fuego que se registro la semana pasada en la cárcel La Victoria: “solo quiero saber si está vivo o muerto”.
Una semana después de la tragedia, aún desconoce su paradero. Las autoridades le han dado información contradictoria, aumentando su angustia.
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«El martes me dijeron que estaba en El Pinito de La Vega, fui y me dijeron que no está», expresó la madre.
La madre afirma ser una mujer enferma, pero no puede dejar de asistir a la penitenciaría por ser su hijo.
Junto a ella, María García denuncia las condiciones precarias de los reclusos, con algunos descalzos y hambrientos. La incertidumbre y el sufrimiento persisten en las afueras del penal.
