Miami.- El fiscal especial Jack Smith presentó este jueves nuevos cargos contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump sobre el caso en el que se le acusa de hacer un mal manejo de ciertos documentos clasificados durante su época en la Casa Blanca.
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Trump está acusado de un cargo adicional de retención deliberada de información de defensa nacional y dos cargos adicionales de obstrucción, relacionados con presuntos intentos de eliminar imágenes de video de vigilancia en su resort de Mar-a-Lago en el verano de 2022.
Según la cadena NBC y el portal USA Today, Todd Blanche y John Lauro fueron los abogados de Trump que se reunieron este jueves con fiscales de la oficina en Washington del fiscal especial, Jack Smith.
La oficina del fiscal especial no ha ofrecido información sobre el contenido del encuentro, pero el diario USA Today ha descrito la reunión como un encuentro de cortesía antes de que un gran jurado vote para imputar a Trump por su papel en el asalto al Capitolio de 2020.
Posteriormente, el expresidente confirmó en redes sociales que hubo una reunión entre sus abogados y los fiscales, pero aseguró que «no les entregaron ninguna notificación de imputación» y pidió no confiar en «noticias falsas».
«Mis abogados tuvieron una productiva reunión con el Departamento de Justicia esta mañana en la que explicaron que yo no hice nada malo, que estaba asesorado por muchos abogados y que una imputación en mi contra destruiría nuestro país», aseveró.
Los documentos clasificados
No se sabe cuándo Trump podría quedar formalmente imputado, pero los periodistas se agolpan ya desde hace días en los alrededores del tribunal federal de Washington a la espera del desenlace de este nuevo capítulo judicial.
El propio Trump colgó la semana pasada un mensaje en su red social, Truth Social, en el que aseguraba que el Departamento de Justicia le había enviado una carta para avisarle de que estaba investigado por el asalto al Capitolio, en el que sus simpatizantes intentaron anular el resultado de las elecciones de 2020.
Ese suceso se cobró la vida de cinco personas y puso a prueba la democracia estadounidense, aunque el Congreso pudo acabar certificando la victoria del actual presidente Joe Biden en los comicios.