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Naciones Unidas.- Los familiares de palestinos asesinados en la guerra en Gaza pidieron este miércoles un alto el fuego permanente en sendas reuniones con el secretario general de la ONU, António Guterres, y los miembros del Consejo de Seguridad.
En una rueda de prensa en la sede de la ONU en Nueva York, y arropados por los embajadores del grupo árabe, tres miembros del grupo de familiares y víctimas detallaron su experiencia durante estos cinco meses del conflicto entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza, que ya ha dejado más de 30.000 muertos en el enclave palestino.
Entre los asistentes se encontraba una joven cuya hermana está recibiendo tratamiento en un hospital de Nueva Jersey, y que ha sufrido la muerte de varios miembros de su familia, relató el representante palestino en Naciones Unidas, Riyad Mansour.
También un doctor voluntario que ha estado varias semanas trabajando en el Hospital Europeo de Rafah, y una doctora palestina-estadounidense cuyo clan familiar ha perdido a más de 150 miembros durante el asalto israelí en Gaza, según detalló ella misma en la rueda de prensa.
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La doctora aseguró que Guterres mostró empatía durante su reunión con los familiares y dijo que hace todo lo que está en su mano, pero en nombre de las víctimas ella afirmó que eso "no ha sido suficiente, y que se debe hacer más para salvar a nuestro amado pueblo palestino".
Con serenidad, pero visiblemente emocionada, la mujer relató duras historias de familias enteras muertas en bombardeos y bebés que nacían en medio de los escombros.
"Tengo primos que han mandado mensajes diciendo que han visto los cuerpos de su madres medio enterrados entre los escombros", aseguró.
El 20 de febrero Estados Unidos vetó en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución presentada por Argelia que pedía un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza, y desde entonces prepara una propuesta propia que propone un cese temporal de las hostilidades.
Sin embargo, de momento no se ha programado ninguna sesión para tratar esta propuesta, y de hecho su embajadora, Linda Thomas-Greenfield, dijo hoy que su país no quería "apresurarse" en sacar adelante la resolución hasta tenerla bien negociada entre los miembros del Consejo.
