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Rusia está dispuesta a mantener conversaciones de paz sobre Ucrania, pero no en base a los "caprichos" de Kiev, sino a los acuerdos de Estambul y las realidades de hoy, ha declarado este jueves el presidente ruso, Vladímir Putin.
En este sentido, el presidente ruso señaló que Ucrania no necesita un alto el fuego "durante media hora o seis meses", sino condiciones para un acuerdo a largo plazo.
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"Si Ucrania no es neutral, es difícil imaginar que haya relaciones de buena vecindad", subrayó el mandatario durante su intervención en el club de discusiones Valdái en la ciudad de Sochi, añadiendo que la neutralidad de Kiev es una garantía de que Ucrania "no volverá a convertirse en una herramienta de terceros países contra Rusia".
Moscú ha subrayado en repetidas ocasiones que para lograr la paz, Kiev debe renunciar a sus ambiciones de ingresar en la OTAN, retirar completamente sus tropas de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y de las provincias de Zaporozhie y Jersón (incorporadas a Rusia después de consultas populares en 2022) y reconocer a estos territorios, así como a Crimea y Sebastopol, como sujetos de la Federación de Rusia. Además, debe garantizarse la neutralidad, no alineación, desmilitarización y desnazificación de Ucrania.
