Un niño de apenas ocho años, a quien le fueron identificadas unas 147 heridas en todo el cuerpo, realizadas presuntamente por una tía, falleció hace algunas horas en Verón, en La Altagracia.
Según reveló un familiar, el niño “era muy inquieto y rompía objetos en la casa”, lo que supuestamente la habría llevado a cometer el hecho.
En ese sentido, se había informado que el infante llevaba días sin asistir al cuido tras ser torturado durante varios días antes de que fuera llevado sin signos vitales al hospital público de Verón, donde identificaron las diferentes contusiones.
De acuerdo al informe del legista, el menor recibió heridas múltiples en diversas partes del cuerpo, que abarcó toda su anatomía; «mostrando signos de tortura y mutilación, además de ciento cuarenta y siete (147) heridas, shock hemorrágico, shock hipovolémico, shock séptico, con seis pérdidas dentales».
Existe señales de que estas torturas se estuvieron realizando durante varios días y que supuestamente utilizó un cuchillo, un machete, un cable para amarrarlo y herramientas para propinarle los golpes.
