Propietaria de Tasty Diks acudirá este lunes a Proconsumidor a «pelear» clausura de negocio

Santo Domingo.- Momentos en que De Último Minuto realizaba un reportaje sobre la sensación que ha causado el negocio «Tasty Diks», restaurante dedicado a la venta de waffles en forma de genitales (pene y vulva), el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor), irrumpió el establecimiento para proceder a su clausura, por presuntamente servir los postres a menores de edad.

Según lo explicado por la entidad, el espacio ubicado en la Zona Colonial, violentó las normas o resoluciones 358-05 de Protección a los Derechos del Consumidor, la 136-03 de niños, niñas y adolescentes, al igual que la 025-2018 del Consejo Directivo de Pro Consumidor.

Esta situación se da luego de la inspección #0686, realizada el 2 de marzo, en atención a una denuncia de interpuesta por la Dirección Central de Policía de Turismo (Politur), que arrojó que el negocio recibía la visita de niños y niñas menores de edad, así lo informó el abogado Daniel Mercado.

A través de la resolución 293-2020 Pro Consumidor ordenó como medida cautelar la suspensión inmediata de las actividades comerciales de la repostería, hasta el momento.

«Previo a hacer un cierre el departamento de inspección va al lugar y realiza un levantamiento. En ese sentido cuando encuentra algo contrario a la ley, con una no conformidad, levanta un acta entonces luego se hace el procedimiento administrativo del lugar. Si esto conlleva a una sanción o cierre temporal, se procede de esta forma», detalló Mercado.

Esas declaraciones fueron negadas por la propietaria de «Tasty Diks», Mallely Beltré, quien dijo sentirse triste y acosada.

«Me siento asediada por el organismo regulador de productos, debido a que las visitas que nos realizan son constantes y sin justificación», indicó al tiempo de explicar que incluso este fin de semana tenía numerosos pedidos para entrega, que tendrá que hacer, así sea desde su hogar.

Beltré, sostuvo que peleará este caso, ya que tiene un negocio que cumple con todas las reglas de lugar y que incluso en la puerta del local tiene estampado un letrero que dice que no acepta menores de 18 años.

Una vez llegaron los inspectores, las empleadas del negocio se encontraban atendiendo a clientes que conformemente hacían los pedidos de los waffles de su preferencia y sorpresivamente se les indicó que su entrega era gratuita.

Precisamente, los comensales salieron a la defensa de «Tasty Diks», sosteniendo una señora que un día acudió con sus hijos y lo que recibieron fueron postres de corazones, en lugar de genitales.

Mallely Beltré aseguró que el lunes 7 acudirá a el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor junto a su abogado.