Aquí tienes una nota de prensa completamente nueva, con otro enfoque narrativo y destacando el impacto de Karl-Anthony Towns, adaptada al estilo del Listín Diario.
NUEVA YORK.– Mientras la atención se centraba en el impresionante arranque de 23-0 que rompió registros modernos de la NBA, el dominicano-estadounidense Karl-Anthony Towns volvió a dejar claro su peso en la estructura competitiva de los New York Knicks, aportando equilibrio, presencia interior y números eficientes en la victoria 146-112 sobre el Jazz de Utah la noche del viernes.
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Aunque el estallido ofensivo inicial fue liderado por Jalen Brunson, autor de 33 puntos, y un certero Deuce McBride, Towns ofreció la cuota de consistencia que los Knicks necesitan para sostener su estatus de aspirantes en el Este. El jugador del Bronx sumó 18 puntos, 9 rebotes y una defensa interior que ayudó a desarticular los intentos de reacción del Jazz.
Un arranque para la historia
Los Knicks salieron como un vendaval: un parcial de 23-0, la mayor racha inicial registrada desde que la NBA implementó el sistema de play-by-play completo en 1997. El Madison Square Garden vibró desde el salto inicial, viendo a un equipo que no permitió puntos durante más de la mitad del primer cuarto.
Brunson coronó la racha con un triple que encendió más aún al público y dejó sin respuestas a un Jazz que venía de ganar en Brooklyn la noche anterior.
La influencia silenciosa pero decisiva de Towns
Aunque no fue el máximo anotador, Towns impuso su sello en múltiples frentes:
- Dominó los tableros con 9 rebotes.
- Abrió espacios con su amenaza de tiro exterior.
- Aportó presencia defensiva, obligando al Jazz a atacar desde zonas incómodas.
- Mostró eficiencia y control del ritmo en ofensiva.
Su producción se dio además en un duelo donde los Knicks no necesitaron forzar minutos en sus titulares, gracias a la amplia ventaja que llegaron a alcanzar —hasta 41 puntos—.
Regreso de Anunoby y aporte profundo del banco
Nueva York también celebró el regreso del alero OG Anunoby, fuera por nueve encuentros debido a una lesión en el tendón de la corva izquierda. El inglés sumó 11 puntos en 22 minutos y lució sólido físicamente, portando una manga protectora en la pierna afectada.
El banquillo volvió a marcar diferencias: McBride encestó 22 puntos con siete triples, y Jordan Clarkson aportó 16 unidades ante su exequipo, recordando los años en que fue Sexto Hombre del Año con Utah.
Jazz sin respuesta
Pese a los 18 puntos de Lauri Markkanen y otros 18 de Keyonte George, el Jazz nunca pudo acercarse lo suficiente como para amenazar la hegemonía local. Con el revés, se quedaron sin la oportunidad de celebrar su primera racha de tres victorias consecutivas en la temporada.
Un triunfo que amplía aspiraciones
Para Nueva York, la victoria no solo es un golpe de autoridad ofensivo —su mejor marca de puntos en la campaña—, sino también la confirmación de que su núcleo, ahora con Towns completamente integrado, tiene la profundidad y estructura para competir con cualquiera en la liga.






