Trípoli.- Guardacostas libios interceptaron en la última semana varias embarcaciones precarias con 563 migrantes a bordo, en su mayoría varones y 70 de los que no se dispone de datos sobre el género, que fueron devueltos al país magrebí pese a ser considerado «no seguro» por organizaciones humanitarias, informó este lunes la Organización Internacional de las Migraciones (OIM).
En su último informe del 2 al 8 de este mes, la OIM señaló que entre los migrantes había 43 mujeres y 12 menores, que fueron todos desembarcados en el puerto de Azawiya, en el noroeste del país, el de la ciudad de Tobruk (noreste) y el de la capital, Trípoli.
La OIM, organismo dependiente de las Naciones Unidas, indicó que desde el comienzo de este año hasta el 8 de marzo varias embarcaciones fueron interceptadas con 4.767 personas a bordo, entre ellas 3.977 hombres, 512 mujeres y 208 menores, devueltas al país norteafricano.
Durante el mismo periodo 82 personas perdieron la vida y otras 58 desaparecieron en la ruta migratoria del Mediterráneo Central, la más mortífera de las conocidas.
Según la misma fuente, en 2024 un total de 21.762 migrantes irregulares fueron devueltos a Libia, mientras se registró la muerte de 665 personas en el mar y otras 1.034 se encuentran desaparecidas en la citada ruta migratoria del Mediterráneo.
El país norteafricano sigue siendo uno de los principales puntos de tránsito para miles de migrantes que buscan llegar al continente europeo.
Puedes leer: El surinamés Albert Ramdin, elegido nuevo secretario general de la OEA
Organizaciones humanitarias denunciaron en varias ocasiones abusos sistemáticos, incluyendo torturas, violencia sexual y explotación laboral dentro de los centros de detención administrados por las autoridades libias y redes de tráfico de personas.
Libia, con una población de siete millones de habitantes, acoge a cerca de 720.000 personas provenientes de 44 países, en su mayoría del continente africano, según la OIM.