Ciudad del Vaticano.- En el marco del Domingo de Ramos, el papa Francisco tuvo un gesto de cercanía hacia la República Dominicana al recordar a las víctimas del trágico derrumbe ocurrido en una discoteca de Santo Domingo, hecho que ha dejado al menos 226 fallecidos.
“Que Dios reciba en su paz a las víctimas del derrumbe en Santo Domingo y brinde consuelo a sus familiares”, expresó el Sumo Pontífice en un mensaje leído durante el rezo del Ángelus, en el Vaticano.
El papa también elevó oraciones por todas las personas que sufren en el mundo, especialmente aquellas golpeadas por conflictos bélicos, la pobreza o fenómenos naturales. Agregó que, pese a sus recientes quebrantos de salud, ha sentido con más intensidad la cercanía de Dios a través de las oraciones de los fieles.
Durante la celebración, el pontífice compartió momentos cercanos con los asistentes, saludando a niños y religiosas en un ambiente de recogimiento y emoción. A su paso, los presentes coreaban: “¡Viva el papa!”.
Al concluir la misa, Francisco se dirigió a los peregrinos en la Plaza de San Pedro, deseándoles un bendecido inicio de la Semana Santa. Más tarde, hizo una pausa en oración ante la tumba del Apóstol Pedro y el monumento a Benedicto XV, según informó el Vaticano.
